Tradime recurrirá al Supremo las nuevas exigencias del ROTT para obtener el título de transportista

La Asociación Empresarial de Transportes Discrecionales de Mercancías de Aragón, Tradime, ha mostrado su "indignación" y "absoluto rechazo" ante las nuevas exigencias para obtener el título de transportista que incluye el nuevo Reglamento de Ordenación de los Transportes Terrestres (ROTT), que entró en vigor el pasado mes de febrero.

Para el presidente de Tradime, Santiago López-Montenegro, la modificación vulnera varios derechos constitucionales, por lo que presentarán un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Supremo, cuya redacción están ultimando, para que se anulen esos cambios.

"Creemos que es una medida francamente negativa que parece que viene a confirmar el camino que lleva marcando Fomento, desde hace muchos años, en el que parece que la pequeña empresa y el autónomo molestamos", explica López-Montenegro.

En este sentido, el presidente ha señalado que el ROTT "restringe la entrada al sector exigiendo el Bachillerato y la Formación Profesional, dejando abierta, con esta decisión, una puerta de acceso al sector a través de las cooperativas de falsos autónomos, que tanto daño están causando al transporte, especialmente a la pequeña y mediana empresa transportista", ha asegurado el presidente.

El título de transporte o certificado de competencia profesional es uno de los requisitos que permite a una empresa o autónomo obtener la autorización de transporte público de mercancías en vehículos de más de 3.500 kilos. Por ello, las personas o empresas interesadas en obtener esta autorización deben poseer este título de transportista o contratar a un gestor que lo tenga.

Hasta ahora, el certificado de competencia profesional se expedía a todos aquellos que tuviesen el título de Formación Profesional de Técnico Superior en Transporte y Logística o que superaran un examen para la obtención de este certificado y para el cual no se exigía ninguna titulación.

Con la entrada en vigor del nuevo ROTT, se ha modificado el acceso a este examen, para el que ahora se exigen unos estudios mínimos de Formación Profesional (ya sea grado medio o superior), Bachillerato o estudios universitarios.

"Tenemos casos de autónomos que no tienen esa formación y, por circunstancias, se ven obligados a sacarse ahora el título y no puede optar a hacer el examen", señala el presidente de Tradime.

En este sentido, la asociación considera que algunos artículos de la reforma del ROTT "son nulos por vulnerar la Constitución y otras leyes como la LOTT, el Estatuto del Trabajador Autónomo o la Ley de Garantía de Unidad de Mercado". López-Montenegro asegura que se vulnera la libre elección de profesión u oficio, la libertad de empresa en el marco de la economía de mercado, la plena autonomía económica de las empresas, la protección de la familia o la protección de los trabajadores autónomos.

"Los nuevos requisitos referidos a la capacitación profesional, tanto por el acceso a las pruebas como la relación laboral exigible, son desproporcionados y contrarios al ordenamiento jurídico", explica el presidente de Tradime.

Para la asociación transportista, el aumento de estos requisitos, con independencia del tamaño de la empresa, "supone un enorme peligro para la supervivencia de los autónomos y las pequeñas sociedades".