Primero Gabriel Fuentes y luego Jairo Quinteros han pasado por la sala de prensa coincidiendo en lo ideal de llegar al Real Zaragoza. El lateral y el central aterrizan en la capital aragonesa ante una oportunidad única: brillar en el fútbol profesional español. En ambos casos es el paso más importante de su trayectoria deportiva, y quieren hacerse un hueco en Europa con el cuadro maño.
Comenzando por fuentes, Sanllehí ha asegurado que, desde que se hizo la propuesta hasta que subió al avión apenas pasaron cinco horas. Y, además, llega un jugador que permite al equipo seguir “muy fuertes” en banda izquierda. Menos épica le ha dado el futbolista, que ha hablado de una decisión tomada “hace tiempo”, y esta es “la oportunidad que Dios mandó”. Es un paso “muy grande” venir de Colombia y estar “en uno de los clubes históricos de España”.
Viene para sustituir a Pep Chavarria, titular hasta la fecha que ha hecho “muy bien su trabajo”. Lo ideal sería “que no se note su ausencia y seguir brindando lo mejor” y que vengan “muchas alegrías”. Aun así, es consciente de que llega de cero, con nuevos compañeros y entrenador nuevo, para dar lo mejor de sí y ganarse la titularidad. No valen los 70 partidos jugados en los dos últimos años, pero le garantizan un ritmo de cara al choque ante el Lugo.
Del cuadro maño ha visto la historia y sabe la exigencia del equipo. Por tanto, abiertamente ha reconocido que quiere “conseguir objetivos y dejar al Real Zaragoza donde merece estar”. Sobre el juego, por tanto, será duro, pero reniega de la fama de tarjetero que le ponen en su patria. “Me siento con la madurez suficiente para afrontar este reto. En los últimos semestres nunca tuve una expulsión o me he perdido un partido por acumulación de tarjetas”, ha señalado.
El grupo el ha recibido muy bien, le ha gustado el ambiente y lo ha calificado de “agradable y amigable”. En estas circunstancias, Fuentes está listo para debutar este mismo domingo frente al Lugo. A pesar del largo viaje, en Colombia estaba entrenando y físicamente se encuentra en plena forma, por lo que podrían verse sus primeros minutos. Y ojo, porque tampoco desprecia la posibilidad de hacerse un hueco en la Selección de Colombia.
Más largo con Quinteros
El propio Quinteros ha reconocido que ha vivido “un proceso bastante largo, con mucha incertidumbre”. Desde Miami esperaba cualquier noticia o novedad para “agarrar ese avión” y colocarse en Zaragoza. Ahora llega a la capital aragonesa con la tranquilidad de que le quedan por delante muchas tardes de fútbol con todo solventado.
Igual que su compañero de presentación, ve su vuelta a Europa -ya estuvo en Valencia- como “una oportunidad”. Ve “el despliegue de un futuro muy bueno que viene por delante”, y está “muy contento, en un club histórico, con fama y una afición que lo da todo”. En el equipo ve “una competencia sana” que ayuda mucho y, a pesar de ser cuarto central, va a pelear por un puesto.
Como curiosidad, fue su compañero Alberto Guitián, al que ha calificado de “un gran ejemplo”, quien le habló maravillas de la ciudad, del club y de la afición. Quinteros tiene ritmo, lleva semanas entrenando de forma individual y, aunque sería una sorpresa, está listo también para debutar ante el Lugo.
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