La cultura invade Murillo de Gállego con la inauguración de la nueva sala de teatro El Gato Negro

Al murillano Alberto Castrillo se le ocurrió rehabilitar una antigua casa familiar del pueblo para montar esta sala de teatro
photo_camera Al murillano Alberto Castrillo se le ocurrió rehabilitar una antigua casa familiar del pueblo para montar esta sala de teatro
https://www.youtube.com/watch?v=1njZiBYgHMY Tiene apenas 200 habitantes, pero eso no impide que el pequeño municipio zaragozano de Murillo de Gállego se convierta cada verano en la isla de Manhattan aragonesa. El teatro, la música, la danza, el cine y, en definitiva, la cultura, se dan cita los meses de julio y agosto en esta localidad con vistas privilegiadas a los Mallos de Riglos y la llenan de toda esa vida que allí cada vez escasea más durante los meses fríos del año. El Manhattan Fest es una reunión ya ineludible para vecinos y turistas y este 2022 su espera ha resultado todavía más especial. Y es que la inauguración de la tercera edición del Festival, que ha tenido lugar este fin de semana, ha sido una inauguración por partida doble gracias a la apertura del Teatro El Gato Negro, un nuevo espacio en el que poder disfrutar de la cultura en el pueblo, pero esta vez para siempre. Fue precisamente al director artístico del Manhattan Fest, el murillano Alberto Castrillo, a quien se le ocurrió rehabilitar una antigua casa familiar del pueblo para montar esta pequeña sala de teatro que ahora se utilizará en “ensayos, cursos, encuentros, residencias y, por supuesto, espectáculos”, ha detallado Castrillo. Desde su creación en 1999, el dramaturgo está al frente de la compañía El Gato Negro y este 2022 por fin ha podido hacer realidad el sueño de darle un lugar de creación a esta humilde compañía, “un lugar donde sabemos que estamos y donde tenemos que volver, el kilómetro cero de todas las giras que pueda hacer El Gato Negro de ahora en adelante”, ha proclamado el director. Cuando Alberto Castrillo visitó París, descubrió una obra “muy especial” que le cambió la forma de ver el teatro y que este sábado pudo traer hasta las tablas del nuevo espacio cultural de Murillo de Gállego para el deleite de vecinos y turistas. “Me encantó, me subyugó, así que la traduje y pude hacerla con la autorización de sus creadores, Yves Hunstad y Eve Bonfanti”, ha explicado el murillano sobre ‘El tiempo de un café’, para él “una de esas obras que, si se desvelan, se matan”. Pero lo que sí se puede revelar de la obra que este fin de semana descubrieron los habitantes de Murillo es que “habla de la teatralidad, del espacio y del tiempo” y que está protagonizada por Claudia Taboada, Lucas Casanova y Angelo Crotti. El viernes ‘Don Gil de Olmedo es sueño’ inauguró el Manhattan Fest en este nuevo teatro que, a lo largo de los meses de julio y agosto, acogerá otros muchos espectáculos, como el concierto de Javier Aquilué o las obras “Tres días en el Valle” y “Esta noche va a nevar”. Un primer paso para una pequeña compañía teatral y una gran noticia para los habitantes de Murillo de Gállego, que ya no tendrán que esperar hasta verano para volver disfrutar de una obra de teatro sin salir de su localidad.