Una charla sobre violencia de género impulsa a una menor a denunciar una violación en Zaragoza

El juicio ha tenido lugar esta mañana en la Audiencia Provincial de Zaragoza
photo_camera El juicio ha tenido lugar esta mañana en la Audiencia Provincial de Zaragoza
Una menor de 15 años ha acusado a un conocido de violarla en agosto del año pasado cerca del parque de Torre Ramona de Zaragoza. La Fiscalía pide para el acusado, de 21 años de edad, trece años y medio de prisión por un delito de agresión sexual. Fue gracias a una charla sobre la violencia de género durante un campamento de verano cuando la chica fue consciente de la situación y decidió denunciar. La menor ha declarado esta mañana en la Audiencia Provincial de Zaragoza que este joven había vivido con su familia el mes anterior y que le avisó para acompañarla a su vivienda, muy próxima del parque de Torreramona de Zaragoza. Una vez allí, en la puerta de un restaurante cerrado, la chica ha declarado que “comenzó a besarla” y que ella le dijo que parara hasta que "la empujó hacia las escaleras”. “Me bajó el pantalón del chandal, me lo subí, me lo agarró y me penetró tres veces”, ha explicado ante el tribunal. Después se zafó de él y subió a su casa. El acusado, según la presunta víctima, “iba borracho” y tras el empujón le provocó una herida en la barbilla. Después de lo ocurrido, la menor acudió a un campamento de verano en Villanúa, donde el director observó, según ha declarado, que encontraba “triste y un poco rara”. Fue durante una jornada de concienciación de violencia de género cuando la menor decidió contar lo ocurrido y denunciar. La menor, nada más pasar los presuntos hechos, llamó a una amiga que ha declarado que le contó que el acusado “la había violado”. Otro amigo, también menor, ha explicado ante el tribunal que quedó unos días después con ella y que le observó un pequeño moratón en la cara, insistió en saber qué era lo que había pasado y que ella al final le dijo lo que pasó. Los forenses médicos que realizaron una exploración a la menor han declarado esta mañana que no observaron nada, sin embargo, esta prueba médica se realizó casi tres meses después de lo ocurrido. El acusado ha preferido no declarar al principio de la sesión y ha aprovechado su última palabra para decir que “todo es mentira” y que “mejor se quedaba callado”. Este joven de 21 años se enfrenta a una petición de la Fiscalía de 13 años y medio de prisión por los delitos de agresión sexual. La acusación particular, ejercida por el letrado Eduardo Ariño García, ha decidido añadir también el delito de lesiones leves por el empujón. La defensa del joven, ejercida por la abogada Raquel Belío García, ha destacado que lo ocurrido “no tiene corroboración en datos objetivos”. Por ello, pide para su cliente la absolución.