El Gobierno de Aragón tiene el firme objetivo de convertirse en referente logístico del sur de Europa y no quiere dejar pasar ninguna oportunidad. El vicepresidente y consejero de Industria, Arturo Aliaga, quiere recuperar el proyecto de la Travesía Central Pirenaica que, a su juicio, permitiría “dar un salto cuantitativo y cualitativo” a la posición estratégica de la Comunidad, con una conexión entre Francia y España a través del Pirineo.
Así lo ha puesto de manifiesto antes de participar en las III Jornadas de Transporte Intermodal, que ha analizado los principales retos y obstáculos en la península Ibérica y ha planteado diversas alternativas para potenciar un transporte de mercancías competitivo y sostenible. En este sentido, Aliaga ha reivindicado la potenciación del Aeropuerto de Zaragoza, las infraestructuras ferroviarias, la A-23, la A-22 o las plataformas logísticas.
Y a todo ello, el vicepresidente quiere recuperar la TCP ante las previsiones de “colapso” de los corredores Mediterráneo y Atlántico. En este sentido, ha nombrado un reciente estudio del Instituto Español de Estudios Estratégicos que resalta la “necesidad” de contar con este corredor entre España y Francia a través del Pirineo oscense. “Dos corredores en la frontera terrestre española serán notoriamente insuficientes y ya se prevé un cierto colapso, por lo que sería un proyecto de interés común impulsar un nuevo corredor de la red básica”, cita ese informe, que resalta la “rentabilidad socioeconómica y costes y beneficios sociales, económicos y climáticos” que tendría este eje.
Sin embargo, la TCP se quedó fuera del mecanismo Conectar Europa, las administraciones ya están trabajando en diferentes inversiones para mejorar la conectividad del transporte intermodal. “El Ministerio ha anunciado obras en el Canfranc por 31 millones y nosotros vamos a dotar de infraestructura eléctrica para alimentar el tren Zaragoza-Sagunto-Valencia”, ha expuesto el vicepresidente aragonés.
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