Suerte dispar la que han sufrido los dos futbolistas del Real Zaragoza que se tuvieron que retirar lesionados del terreno de juego de la Sociedad Deportiva Huesca. Una vez realizadas las pruebas médicas pertinentes, se ha descartado que Azón tenga rotura muscular, quedándose en contractura el susto, mientras que Nano Mesa sí podría haber dicho adiós a la temporada tras su encontronazo con Insua.
Comenzando por el canterano, las exploraciones de este lunes descartaban una lesión muscular significativa, interpretándose las molestias como una contractura a nivel de la musculatura isquiotibial, quedando pendiente de evolución, tal y como refleja el Real Zaragoza a través del parte médico.
Más grave es lo de Nano Mesa. El canario sufría una subluxación del hombro izquierdo y se le practicaba un estudio radiólogo urgente para descartar una lesión ósea. Dicha observación era completada este lunes con una resonancia magnética que sí apreciaba una luxación acromioclavicular de grado II de Rockwood, una rotura de grado II de fibras profundas del músculo trapecio y una bursitis subacromial del hombro izquierdo.
El club informa que el jugador será sometido a un tratamiento conservador mediante inmovilización con cabestrillo y fisioterapia, obligado a estar apartado de los terrenos de juego durante varias semanas.
Con Azón siendo duda para recibir al Burgos el domingo, Nano Mesa será baja segura, sumándose al sancionado Chavarría como principales ausencias en la convocatoria de JIM, además de los habituales Grau y Vigaray.
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