La Biblioteca Universitaria expone hasta 33 tratados de arquitectura antigua fechados de 1535 a 1796

Esta colección explica el concepto y la práctica de la arquitectura escrita. Foto: Laura Trives
photo_camera Esta colección explica el concepto y la práctica de la arquitectura escrita. Foto: Laura Trives
Hasta 33 tratados de arquitectura antigua de los siglos XVI al XVIII ya se encuentran expuestos en la Biblioteca General de la Universidad de Zaragoza, pertenecientes a su fondo antiguo. Esta recopilación explica el concepto y la práctica de la arquitectura escrita, mostrando como el arquitecto tiene distintos modos de poder plasmar sus ideas sobre el arte. Estará disponible al público hasta el próximo 30 de junio. La vicerrectora de Política Científica de la Universidad de Zaragoza, Rosa María Bolea Bailo, explica que estos tratados constituyen una de las colecciones más apreciadas en esta biblioteca. “La función de estas exposiciones consiste principalmente en divulgar el rico patrimonio que tenemos dentro de la Universidad de Zaragoza para que así los investigadores, y por supuesto el público en general, puedan aprovechar y disfrutar de nuestra obra”, señala. La directora de la Biblioteca de la Universidad de Zaragoza, Cristina Seguí, remarca que en esta muestra se habla de la arquitectura escrita, “que se expresa por medio de la escritura y se apoya en el dibujo”. “El arquitecto tiene distintos modos de poder plasmar sus ideas sobre el arte. Por un lado, la propia obra arquitectónica y lo que os vamos a mostrar con esta exposición es como plasma sus ideas mediante la palabra y el dibujo”, detalla. 33 tratados de ediciones fechadas entre 1535 y 1796 La exposición se divide en tres apartados. Un primero, que es el más voluminoso con doce vitrinas, tiene por objeto el tratado de la teoría práctica de la arquitectura. Aquí se juntan dos clásicos como son Vitruvio, del que destaca el tratado más antiguo (una rara edición de 1536) que conserva la Biblioteca recuperado en el Renacimiento como un ejemplo de la idea platónica de lo que tiene que ser la belleza arquitectónica. Tanto el de Vitruvio como el de Alberti son tratados más bien teóricos. A parte de estas ideas un poco platónicas de la arquitectura, de la belleza, de la dimensión, de la proporción, también hay otras obras que son más prácticas, que servirán al arquitecto para poder realizar su obra. Entre los tratadistas españoles se presentan obras de Lorenzo de San Nicolás, Juan Bautista Villalpando, Francisco de los Santos, Juan de Arfe y Villafañé y Antonio Plo. Se incluyen también en este apartado dos compendios matemáticos que dedican uno de sus volúmenes a la arquitectura civil, como son los tratados de Vicente Tosca y Benito Bails. El segundo aparato consta de cuatro vitrinas relacionadas con el tratado sobre el dibujo en la arquitectura, tanto desde un punto de vista artístico como también desde la geometría y la ciencia. La arquitectura está a caballo entre las ciencias y las artes. En el dibujo se plasman bien estas dos vertientes. Se encuentran los tratados de dibujo y del trazado de sombras de Buchotte y Delagardette, un tratado de Jousse sobre carpintería aplicada a la arquitectura y los tratados de Simonin y Frezier sobre el arte de cantería o corte de piedra para la construcción. En el último apartado se pasa a la ingeniería con libros sobre arquitectura hidráulica y militar. Se le han dedicado otras cuatro vitrinas. Incluye la imponente obra de Bernard Forest de Belidor sobre arquitectura hidráulica y una pequeña selección de tratados de arquitectura militar y fortificaciones, entre los que destacan la de Sebastián Fernández de Medrano y la del mariscal Vauban por la repercusión que tuvieron en la construcción de sistemas defensivos y en la formación de los ingenieros militares. Además de estos apartados, las tres vitrinas de armario que presiden la sala se han reservado para mostrar tres lujosas ediciones en gran formato del siglo XVIII que corresponden a “Los diez libros de Arquitectura” de Vitruvio en la edición de la Imprenta Real de 1878, una edición de “La regla de cinco órdenes de la Arquitectura” de Vignola, titulada “Il Vignola illustrato” y publicada en Roma por Giambatista Spampani en 1770, y "Los cuatro libros de la Arquitectura” de Andrea Palladio en una edición de Ottavio Bertotti Scamozzi con el título de "Le fabbriche e i disegni" publicada en Vicenza por Giovanni Rossi en 1786.