Los incendios forestales calcinaron el año pasado un total de 87.879,74 hectáreas en España, lo que supone un 12% menos en relación a la media del último decenio (99.949,80).
Los datos provisionales proporcionados por las comunidades autónomas al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, recogidos por Servimedia, indican que el año pasado fue el sexto con menor superficie forestal quemada por los incendios en la última década, por detrás de 2018 (26.563,51 hectáreas), 2014 (48.717,83), 2013 (61.690,61), 2020 (67.516,39) y 2016 (68.269,30).
Durante el año pasado se produjeron 8.780 siniestros forestales, de los que 2.914 fueron incendios (que arrasaron al menos una hectárea) y 5.866 conatos (con menos de una hectárea quemada).
De las hectáreas arrasadas, que abarcan un 0,316% del territorio nacional, un total de 19.729,34 corresponden a vegetación herbácea (pastos y dehesas) y el resto a vegetación leñosa, concretamente 43.647,05 hectáreas de matorral y monte abierto, y 24.503,35 de superficie arbolada.
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