Los hosteleros de Huesca miran al 2022 "con optimismo a pesar de las dudas y dificultades"

El final del año ha resultado más complicado, con numerosas cancelaciones por positivos Covid
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Los empresarios y profesionales de hostelería y turismo de Huesca hacen balance de este año 2021 tras llevar acumulados más de 20 meses de pandemia y en un ejercicio en el que se han tenido que soportar numerosas situaciones o cambios. Termina este año con nuevas restricciones y aun siendo conscientes en todo momento de la situación general respecto a la pandemia, dichas afecciones "están perjudicando seriamente al sector". No obstante, los hosteleros miran al futuro con “cierto optimismo a pesar de todas las dudas y dificultades”. Desde la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo de Huesca se lanzó un cuestionario al que han dado respuesta un total de 102 empresas y que se adaptó según los sectores de alojamiento, restaurantes, cafés-bares y ocio nocturno. De esta manera se pudieron obtener algunos datos en cuanto a sensaciones generales, empleo y ocupación a la vez que analizaban demandas y problemáticas específicas para cada uno de estos sectores. El sector de alojamiento representa en Aragón una oferta de 43.381 plazas hoteleras de alojamiento hotelero, 17.908 de carácter extrahotelero y 34.417 al aire libre. De estas plazas, el 42%, 61% y 73% se encuentran, respectivamente, en la provincia de Huesca; algo que muestra el poder de la provincia en cuanto a destino y potencial turístico. En general este sector hotelero termina 2021 con un año “lleno de altibajos”. Con momentos en los que se ha trabajado muy bien y que terminarán con cifras históricas, como la registradas en verano en algunos puntos. No obstante, conviene analizar en su justa medida estos datos por el “efecto salida” que muchas personas necesitaban en ese momento y dado que prácticamente toda la demanda interna se quedó en ese momento en territorio nacional. El final del año ha resultado más complicado, con numerosas cancelaciones por positivos Covid y por las recomendaciones de vuelta a los destinos de forma previa y otras malas informaciones asignadas en algunos portales o medios. Los responsables de los alojamientos quieren mejorar de cara a otros años y de forma conjunta con la DGT -con quien ya se ha dispuesto un encuentro y se fijará una agenda futura-, Aemet y medios de comunicación. Los alojamientos soportan las plantillas medias más altas del sector con una media de doce trabajadores. Un 40% de las empresas poseen plantillas medias por encima de esa ratio. En cuanto a ocupaciones, diciembre espera terminar con una media en la provincia del 40%. Será mucho mejor en destinos del Pirineo (65-70%) y a pie de pista de esquí donde se esperan alcanzar cifras de entre el 80-85%. El cómputo general del año apunta a que se situará en una media de ocupación hotelera por debajo del 39%. En el caso de restaurantes, los establecimientos en la provincia de Huesca suelen tener unas plantillas medias de unos siete u ocho trabajadores. En el año 2021, un 84,2% de estos trabajadores se han tenido que acoger al ERTE en algún momento, si bien ahora representan apenas un 10%. Esta cifra podría ser mayor en caso de que se pudieran activar Ertes por fuerza mayor o causas productivas y con el nivel de restricciones que existe actualmente. En cuanto al mes de diciembre, el sector ha sufrido muchas cancelaciones sobre todo relacionadas con positivos o restricciones. Esto hace que un 56% de los establecimientos se haya quedado este final de año a menos del 40% de su capacidad. La forma mayoritaria de reservas en los establecimientos suele ser por vía telefónica. Como asignatura pendiente queda mejorar la política de reserva en los establecimientos. Un 74% de los restaurantes consideran que se debería cobrar un anticipo por reserva o la obligatoriedad de dejar una tarjeta como garantía de la misma. Preocupa notablemente la falta de personal (8,5 sobre 10) y otros temas como la subida de la luz o materias primas. Muchos negocios están soportando facturas con un incremento del 40% sobre anteriores meses. Por su parte, el sector de cafés-bares se encuentra bastante atomizado con micro-pymes que soportan estructuras familiares, pero también otros negocios que ocupan a más de siete u ocho trabajadores (un 20% del total). Para estas empresas, el cliente habitual suele ser el vecino o local junto al de empresas, negocios o administraciones cercanas. Esto se da sobre todo en localidades cabeceras de comarca. En el Pirineo también hay mucho cliente de segunda residencia y turista nacional. El comportamiento de los clientes respecto a las normas y el Covid se valora positivamente (8,20 sobre 10). Para un 44% de las empresas ha sido “el peor” o “uno de los peores” años de su historia aunque un 39% afirma que “no ha sido un mal año, a pesar del Covid y todas las dificultades”. Esto se da sobre todo en negocios que han visto en la terraza una posibilidad extraordinaria de trabajo y con el apoyo de los clientes habituales citados anteriormente. Las restricciones de horario o el no consumo en barra son las grandes preocupaciones actuales, unido a la necesidad de planes de formación y la falta de personal que resulta grave en general y más si cabe en zonas rurales. El ocio nocturno en la provincia de Huesca sigue soportando muchísimas dificultades y más de 450 días de cierre desde el inicio de la pandemia. La afección y cierre en Nochevieja se traduce en pérdidas medias por local por venta de entradas de unos 6.000 euros, más otros 12.000 por venta de consumiciones. Esta situación es todavía más grave en locales como salas de fiesta o discotecas de la provincia. Todos los negocios afirman que este año ha sido “el peor” o “uno de los peores” de su historia. La situación actual no es alentadora y en general se afronta el año 2022 siendo más “pesimistas que optimistas”. Se demanda reactivación de ayudas y líneas específicas para el sector más perjudicado de la pandemia. El 100% de las empresas afirma sufrir un señalamiento continuo por parte de la administración y buena parte de la sociedad. Medidas como la implantada recientemente en Galicia se verían con buenos ojos para los propietarios. La Xunta de Galicia ha llegado a un acuerdo con empresarios de la noche para que aquellas empresas que desean cerrar voluntariamente puedan tener una indemnización directa por parte del Gobierno. Esta se establece según los metros cuadrados o posibilidades de cada local. Una medida que se considera adecuada a este momento y mientras exista este nivel de restricciones. En todo caso se demandan nuevas soluciones que permitan trabajar al sector con unas condiciones dignas. En el cómputo general, el sector de la hostelería y el turismo de la provincia de Huesca mira al futuro con “cierto optimismo a pesar de todas las dudas y dificultades” (un 42% de las empresas). Aunque la mayoría de los negocios afirma que 2021 ha sido uno de los peores años de su historia. Para el alojamiento es esencial la reactivación de nuevas ayudas o subvenciones (se valora con un índice de 8,64 sobre 10). Para los restaurantes, las ayudas, junto a la falta de personal, preocupa enormemente. Pero aun es mayor el problema que se deriva de la prolongación de las restricciones que preocupa con un alto índice, 9,25 sobre 10. En cafés-bares lo que más inquieta es el cierre de la barra y la falta de personal (8 sobre 10). Para el ocio nocturno, hay una necesidad urgente de activar ayudas específicas para el sector (preocupa con un índice de 10 sobre 10) y también intranquiliza la prolongación o el nivel de las actuales restricciones (10 sobre 10).