Vox denuncia en el Parlamento autonómico sufrir "odio" y "violencia" por "pensar diferente"

La diputada de Vox Marta Fernández ha comparecido en el Pleno de este jueves // Foto: Cortes de Aragón
photo_camera La diputada de Vox Marta Fernández ha comparecido en el Pleno de este jueves // Foto: Cortes de Aragón

El grupo parlamentario de Vox en las Cortes ha presentado una enmienda en el Pleno de este jueves a través de la que condena “todo discurso que busque o tenga como fin fomentar o difundir ideas que discriminen, estigmaticen, calumnien, injurien, humillen o abiertamente llamen al uso de cualquier medio no legal a hostigar a una persona o grupo por motivo de raza, sexo, religión, ideología política, opción sexual, nacionalidad o situación económica”. En este sentido, la diputada Marta Fernández ha manifestado que su formación sufre “odio” y “violencia”. “Somos insultados y agredidos por pensar diferente”, ha expresado.

Vox ha mostrado alegría y satisfacción a raíz de la iniciativa llevada por el cuatripartito de manera conjunta a la sesión plenaria sobre discursos y delitos de odio. “Nos alegra enormemente que se haga eco del clima de odio y crispación en el que se encuentra sumida nuestra sociedad”, ha expuesto. A juicio de Fernández, odio fomentado muchas veces por discursos políticos que no respetan la libertad ideológica, de pensamiento o de expresión. “Odio que pretende estigmatizar y señalar como objetivo para los violentos a la tercera formación política de España, con cuatro millones de votantes”, ha continuado. “Odio que trajo principalmente la entrada a las instituciones de la extrema izquierda de Podemos, con sus alertas antifascistas tras la entrada de Vox en el parlamento andaluz”, ha recordado.

La propia diputada ha ejemplificado esta cuestión con episodios vividos de “agresiones en nuestros mítines, con lanzamiento de piedras, huevos y botellas, agresiones a cargos institucionales, orgánicos y militantes, asalto a mesas informativas, vandalización y daños en sedes, vehículos y propiedades particulares”. Ha añadido las amenazas, difamaciones, injurias y calumnias, “acusándonos gratuitamente y sin ningún fundamento ni prueba”, de estar implicados en crímenes y asesinatos, así como “humillando a víctimas del terrorismo permitiendo homenajes a los asesinos etarras del odio”.

Además, se ha dirigido directamente al Gobierno Central apuntando que “escuchar la verdad es lo que realmente les molesta, y eso para ustedes significia odio, pero pensar diferente no es sinónimo de generar odio, sino que se trata de libertad”.

En última instancia, ha incidido en que el “modus operandi” del Ejecutivo consiste en “repetir las mentiras hasta la náusea, utilizando de voceros a los medios de comunicación públicos”, antes de concluir comentando que “el tiempo hablará en las urnas”.