La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, se ha abierto este jueves a la idea de la empresa pública energética que solicita Unidas Podemos y valida la vicepresidenta Teresa Ribera admitiendo que habrá que “reflexionar” sobre “cómo gestionar todas aquellas concesiones que puedan ir venciendo”, pero ha reiterado que un proyecto así “no tiene un impacto a corto plazo, inmediato, sobre el precio de la luz”.
Sus declaraciones, realizadas en entrevista con Antena 3 y recogidas por Servimedia, aclaran la posición que la misma Calviño había fijado la semana pasada cuando abogó por “centrarnos en medidas eficaces y centrar nuestros esfuerzos en aquellos ámbitos que pueden tener un impacto real, y no otras ideas que ya sabemos que no son eficaces o no pueden llevarnos a los objetivos que tenemos, que es un sistema energético con la energía más limpia y barata posible”. Dichas manifestaciones fueron interpretadas como una oposición a la idea lanzada por la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera.
“El Gobierno está totalmente decidido y por eso no hemos dejado de actuar y hacer propuestas que tengan un impacto real a corto plazo”, aseguró Calviño. Sin embargo, expuso que el foco está centrado en “todas” las medidas que considera “eficaces a corto plazo para que la subida de los costes en los mercados mayoristas no repercuta en la factura eléctrica y que, en definitiva, no penalice las finanzas de las familias y la competitividad de nuestras empresas, sobre todo las pymes”.
“Cosa distinta es que, como decía muy bien la vicepresidenta Rivera, de ahora a la próxima década tendremos que reflexionar sobre cómo gestionar todas aquellas concesiones que puedan ir venciendo, pero es evidente que no tiene un impacto a corto plazo inmediato sobre el precio de la luz”, ha señalado.
Calviño ha realizado una defensa férrea del compromiso del Gobierno con acometer una transición energética “indispensable”, como ha urgido Naciones Unidas, actuando desde dos orientaciones: “una mayor eficiencia energética de los edificios, de la industria, de los vehículos y, por otra parte, una mayor penetración de las energías renovables, que son el sol, el viento, el agua”.
Sin embargo, ha explicado que el trabajo es largo reprochando a los Gobiernos del PP haber dado pasos hacia atrás en la estrategia. “Hemos acelerado todo este proceso de transición desde hace tres años, pero, claro, en tres años no se pueden anular o compensar diez años de inacción. Tenemos que recordar que una de las primeras medidas que tomamos fue precisamente quitar el impuesto al sol, que lo que hacía era desincentivar el autoconsumo solar por parte de las instalaciones familiares”, ha recriminado.
Calviño se lamentó de que, pese a ello, “no estamos consiguiendo explicar realmente lo que llevamos haciendo desde hace tres años” pasando a enumerar las medidas adoptadas. Entre ellas citó que se han aumentado “sustancialmente” la subasta en energías renovables, reducido el IVA y el impuesto especial sobre la electricidad o enviado al Congreso dos proyectos normativos “para reducir los beneficios excesivos que perciben las compañías energéticas por las centrales que ya están amortizadas y que son muy baratas”.
Por último, ha recordado el anuncio esta misma semana de una nueva subasta de energías renovables de 3.300 megavatios “para que, cuanto antes, haya una parte de la energía del sistema que esté a un precio medio de 25 euros”. “El Gobierno no ha dejado de actuar con medidas, actuando con los instrumentos que tenemos en nuestro control y también haciendo proyectos normativos que yo espero se acelere su tramitación en el Parlamento para que también consigamos así bajar el precio de la luz”, ha resumido, garantizando que seguirá actuando “de forma ágil y decidida para proteger el interés de los ciudadanos”.
