La realidad virtual permite crear entornos y experiencias docentes simuladas que pueden contribuir a una mejor enseñanza, en todos sus niveles. Una experiencia inmersiva que bien diseñada aporta una dimensión propicia para el debate, la reflexión y la adquisición de competencias profesionales. Es un acierto que estás técnicas sean llevadas a los entornos de aprendizaje.
En el Instituto de Formación Profesional del IES Virgen del Pilar, Zaragoza, hay un ejemplo. El proyecto coordinado por el profesor Joaquín Lafuente se concreta en una herramienta educativa en realidad virtual para Formación Profesional de técnicos en refrigeración industrial con amoniaco; un refrigerante complejo para manipularse en un aula. La realidad virtual, en el contexto de una metodología de aprendizaje como la gamificación, facilitan al profesorado y al alumnado a conocer las técnicas de instalación o resolver problemas que surgen en instalaciones reales.
Otro aporte importante de la experiencia es el trabajo colaborativo y las sinergias creadas entre tres centros educativos y dos empresas privadas. Además del Instituto de Formación Profesional del IES Virgen del Pilar, quien asume la coordinación del proyecto, participan el Institút Gindàvols (Lleida), C.I.P.F.P. Canastell (Alicante), Johnson Controls y Danfoss.
En el contexto de la enseñanza la incorporación de las metodologías activas de aprendizaje aporta una dinámica diferente en la formación. Por otra parte, fomenta la transferencia entre enseñanza-empresa, el refuerzo o adquisición de las competencias digitales y tecnológicas, la inclusión de la mujer y el estudio sobre el uso de productos ecológicos en este sector de la refrigeración.
Es un proyecto financiado por el Ministerio de educación y el Fondo Social Europeo. Se trata de una iniciativa que aporta uno de los primeros softwares a nivel mundial en realidad virtual que se ha realizado en el sector de la refrigeración industrial.
