Es posible que en algún momento de la vida se haya tenido la sensación de que alguien nos mira o incluso de que nos siguen por la calle. Cuando esta sensación se convierte en una creencia firme y permanente podríamos estar ante un caso de delirio de persecución.
Un delirio es una creencia completamente irracional, que no tiene ninguna base demostrable. Es una creencia que, a pesar de hacerle ver a la persona que es falsa porque sus argumentos y/o pruebas no la justifican, sigue creyendo firmemente en su idea.
Si sospechas que puede tratarse de una alteración psicológica, lo aconsejable es que le sugieras suavemente que busque atención médica, o bien ponerlo en conocimiento de un familiar o amigo cercano, para que puedan orientar el caso como consideren más conveniente. En cambio, si crees que puede estar en lo cierto, lo más recomendable sería que denuncie la situación en comisaría para que se puedan hacer cargo como mejor corresponda.
Mi consejo: Sea cual fuere la situación, lo importante es que le propongas ponerlo en manos de los profesionales y expertos que realmente puedan ayudarle con su caso.
