Vuelve Erasmus rural, una iniciativa pionera que este año se ha replicado por toda España

Tarazona es una de las localidades que participa en el Erasmus rural
photo_camera Tarazona es una de las localidades que participa en el Erasmus rural

Irse de Erasmus sin salir de Zaragoza es posible. Se trata de la nueva edición de Erasmus rural donde estudiantes universitarios hacen prácticas en empresas, instituciones y asociaciones de los municipios zaragozanos. Una iniciativa puesta en marcha por la Diputación de Zaragoza y la Universidad de Zaragoza que, tras el éxito de las tres primeras convocatorias, en 2021 se ha empezado a replicar en toda España, de forma que tanto dentro como fuera de Aragón ya se han puesto en marcha al menos otros seis proyectos con idéntica filosofía.

Los programas Desafío y Arraigo son dos de las líneas de trabajo que se han impulsado desde su creación la Cátedra DPZ sobre Despoblación y Creatividad, la primera cátedra de este tipo que se constituyó en España. Se financia mediante una aportación económica de la Diputación de Zaragoza y se gestionan a través de Universa, el Servicio de Orientación y Empleo de la Universidad de Zaragoza.

Una iniciativa que desde su puesta en marcha ha tenido una “excelente acogida”, ha afirmado el presidente de la Diputación de Zaragoza, Juan Antonio Sánchez Quero, quien ha explicado que con el Erasmus rural “se busca contribuir a la llegada de talento al medio rural y dinamizar de esta forma su tejido económico y social”. Sánchez Quero ha subrayado que esta iniciativa es “el mejor ejemplo de que para la lucha contra la despoblación son fundamentales la creatividad, el talento y el trabajo en red de todos los agentes sociales, políticos y económicos implicados”.

Por su parte, el rector de la Universidad de Zaragoza, José Antonio Mayoral, ha recordado que esta iniciativa ha recibido el Premio Expansión a la Innovación en Recursos Humanos, el Premio RSA en la categoría de entidad no lucrativa o el Premio de Universidades Excelentes en la categoría de Empleabilidad. “El Erasmus rural pone en contacto a personas de diferentes edades, zonas de residencia e inquietudes, lo que enriquece a todos los que participan en este proyecto, a los estudiantes, a los empresarios y a las entidades que los acogen”, ha añadido Mayoral.

El Erasmus rural también ha sido reconocido como práctica ejemplar a escala continental en congresos internacionales y por redes europeas como Euromontana. Además, ha suscitado el interés de un gran número de medios de comunicación a nivel autonómico, nacional y también internacional.

Dos iniciativas con un mismo objetivo 

Este proyecto con dos ramas: el programa Desafío, dirigido a estudiantes universitarios, y el programa Arraigo, enfocado a graduados que hayan acabado su titulación en los tres últimos cursos. En apenas un mes, ya se han recibido solicitudes de más de 330 jóvenes y de unas 60 entidades que quieren participar en esta cuarta edición.

Durante las tres primeras ediciones del Erasmus rural, un total de 79 jóvenes universitarios han hecho prácticas en 31 municipios distintos del medio rural zaragozano. Más de la mitad de esas prácticas (41) se realizaron el año pasado: 24 dentro del programa Desafío y 17, en el programa Arraigo.

En cuanto a la proporción de hombres y mujeres participantes, en el programa Desafío el 60% fueron mujeres y el 40%, hombres, mientras que en el programa Arraigo, el 65% fueron mujeres y el 35%, hombres.

Fueron estudiantes que procedían de hasta 29 titulaciones distintas como Veterinaria, Economía, Periodismo, Enfermería, Trabajo Social, Educación Infantil, Marketing e Investigación de Mercados, Geografía o Historia del Arte, así como Máster en Ingeniería Biomédica, en Profesorado, en Gestión del Patrimonio o en Arquitectura. Estos participantes desempeñaron distintas funciones en explotaciones ganaderas, ayuntamientos, residencias de ancianos, escuelas infantiles, fundaciones, asociaciones, entidades empresariales, etc.

Es el caso de Tamara, graduada en Historia del Arte y que actualmente se encuentra realizando el máster en Profesorado, quien ha asegurado que ha sido una experiencia “muy interesante” porque, al estar acostumbrada a ir al pueblo en vacaciones, “ahora se puede ver desde una perspectiva completamente distinta”.

Las prácticas pueden desarrollarse hasta el 15 de noviembre y su duración oscilará entre las 120 y las 500 horas por universitario. La Diputación de Zaragoza financia la totalidad de los beneficios para el estudiante y para la entidad empleadora. De forma que las ayudas comprenderán gastos de alojamiento, manutención y desplazamiento, una remuneración por la labor realizada y la Seguridad Social tanto del universitario como de la empresa o institución.