Jaca se asoma a su día grande con preocupación y recuerda que este viernes "no hay fiesta"

La ciudad pirenaica fue cerrada perimetralmente hace una semana por la escalada de contagios
photo_camera La ciudad pirenaica fue cerrada perimetralmente hace una semana por la escalada de contagios

Jaca mira con mucha preocupación este viernes. En unas fechas normales, la ciudad estaría ya engalanada, con un ambiente festivo palpable esperando su fiesta por antonomasia, el Primer Viernes de Mayo. Una fecha que celebra la victoria de una batalla entre cristianos y musulmanes en el s.VIII. Este año la batalla es otra. Los últimos datos sitúan a Jaca en un riesgo elevado de contagios, su incidencia acumulada en 14 días (IA) ha aumentado este miércoles a 936 casos por 100.000 habitantes, 500 puntos más que la media aragonesa.

La ciudad pirenaica fue cerrada perimetralmente hace una semana por la escalada de contagios que está sufriendo desde hace un mes (156) y este miércoles ha detectado doce de los 27 casos en toda la provincia de Huesca. El alcalde de la ciudad, Juan Manuel Ramón, ha advertido que “no hay fiesta” y ha pedido a los jacetanos “que pasen un día tranquilo”. El alcalde ha pedido a sus ciudadanos que “escuchen a la 13.50 horas la radio desde casa y que canten el himno en los balcones”.

El lunes se reunió la Junta Local de Seguridad, compuesta por el alcalde y por la subdelegada del Gobierno en Huesca, Silvia Salazar, para abordar los controles del Primer Viernes de Mayo. Los esfuerzos principales están destinados a acabar con cualquier fiesta en espacios públicos (botellón) como en los lugares privados (huertos, bodegas, locales, viviendas, etc.). El dispositivo estará compuesto por la Policía Local de Jaca, Policía Nacional, Guardia Civil y Policía Adscrita y comenzará este jueves y durará hasta el sábado.

El alcalde ha pedido a los jacetanos que no realicen fiestas privadas en “huertas, bodegas o locales” y que si se dan estos encuentros “que se respete al máximo la normativa sanitaria en estas reuniones”. “La situación es preocupante, hay muchos ingresos en la UCI”, ha expresado el primer edil.

Una preocupación compartida por los empresarios jacetanos que enfrentan “con preocupación y con ánimo bajo” este Primer Viernes de Mayo. La presidenta de la Asociación de Empresarios de Comercio y Servicios de la Jacetania (Acomseja), María Ángeles Bandrés, considera que este confinamiento “es el peor escenario que se podría dar” coincidiendo con la apertura de Aragón el próximo 9 de mayo. Sin embargo, no deja de lado el optimismo y cree que, si las medidas hacen efecto, “el plato fuerte será para el verano”.

Muchos restaurantes han decidido cerrar y anular reservas para las comidas o almuerzos este viernes para prevenir contagios. Aun así, Bandrés afirma que los bares que han decidido abrir este día “cumplen con todas las condiciones sanitarias”.

Primer Viernes de Mayo en familia 

En una utopía fuera del Covid, Jaca ahora mismo estaría engalanada y llena de gente lista para celebrar este día “tan importante para un jaqués”. El presidente de la Hermandad del Primer Viernes de Mayo, Carlos García, ha pedido que se pase esta fecha “en familia y con convivientes para que se pueda celebrar al año que viene”.

El Primer Viernes de Mayo, una fiesta que se lleva celebrando más de 1.000 años, tendría a Jaca ahora “en plena ebullición”. “Este año hay que celebrar el Primer Viernes en intimidad”, ha concluido García.