Un bulo sobre las vacunas hace creer que meras “sospechas” de posibles efectos adversos están confirmadas

En esta franja, se funciona con el sistema de autocita
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Un bulo que circula en redes sociales sobre las vacunas contra la Covid-19 hace creer que una serie de meras “sospechas” de posibles efectos secundarios son en realidad consecuencias probadas y confirmadas de las vacunas.

Se trata de un listado que circula por Telegram con las supuestas “reacciones adversas” a la vacuna contra la Covid-19 de Pfizer y BioNTech que se han dado en el Reino Unido. En este listado se incluyen, por ejemplo, 212 fallecimientos o 393 casos de lesiones que supuestamente están relacionados con la vacuna.

Esta verificación ha sido realizada en el marco del proyecto #VacúnaTE que Maldita.es y la agencia de noticias Servimedia desarrollan contra la desinformación sobre las vacunas de la Covid-19 con el apoyo de Google News Initiative.

El listado no recoge casos de efectos secundarios confirmados de la vacuna, sino sospechas de posibles efectos secundarios que luego tienen que ser revisadas para identificar “riesgos”, según explica la Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios (MHRA por sus siglas en inglés) del Reino Unido.

Según esta agencia, cualquiera (no sólo sanitarios) puede notificar una sospecha y la existencia de esta notificación “no significa necesariamente que la vacuna haya causado la reacción sospechada”. LA MHRA manifiesta que no se pueden sacar conclusiones sobre la “seguridad y los riesgos de las vacunas” basándonos en estos datos.

El texto que circula incluye un enlace a la página en la que se publica el informe semanal sobre las reacciones adversas de las vacunas contra la Covid-19 aprobadas en el Reino Unido -la de Pfizer y BioNTech y la de Oxford-AstraZeneca- que elabora la MHRA. En la página, además del informe, hay otros documentos publicados, como uno en el que se recogen todas las notificaciones recibidas para el análisis de la vacuna contra la Covid-19 de Pfizer y BioNTech.

El documento que está publicado en esta página está actualizado a fecha del 22 de marzo, pero el que utiliza el bulo es una versión anterior, del 4 de marzo, que se puede encontrar en la herramienta de archivado WayBack Machine.

Trastornos sanguíneos

Los diferentes apartados de este documento (actualizado a 4 de marzo) coinciden con los de la lista que se está moviendo. Empieza por las notificaciones de trastornos sanguíneos, siguiendo con los cardiacos, los congénitos, los auditivos, etc. Además, las cifras son las mismas.

Según explica la MHRA, este informe resume la información recibida a través del ‘Yellow Card Scheme’ (programa de tarjeta amarilla, en español). Este programa “es el sistema del Reino Unido para notificar sospechas de efectos secundarios de medicamentos y eventos adversos con dispositivos médicos, administrado por la MHRA”.

Pero las notificaciones recibidas a través del ‘Yellow Card Scheme’ “no son efectos secundarios probados”, asegura la MHRA, sino sospechas de posibles efectos secundarios. Es decir, que los casos recogidos en este informe sobre la vacuna de Pfizer y BioNTech no corresponden a efectos secundarios de la vacuna confirmados. Según explica la agencia, “enfermedades coincidentes subyacentes o no diagnosticadas previamente también pueden ser un factor en los informes”.

“La MHRA utiliza una variedad de fuentes de datos adicionales, como registros médicos electrónicos que vinculan los registros de vacunación con eventos médicos, para rastrear sospechas de reacciones adversas y la seguridad de la vacuna”, explican desde la agencia. Lo que hace la MHRA con estos informes de notificaciones es revisarlos “para identificar posibles nuevos riesgos”.

Por lo tanto, los datos que aparecen en la lista que se está difundiendo no son casos de efectos secundarios confirmados, sino notificaciones de sospechas de posibles efectos secundarios que la MHRA revisa posteriormente. El número de sospechas de efectos secundarios notificadas no es inusual en comparación con otros tipos de vacunas, según la MHRA.

En el último informe sobre las notificaciones del programa ‘Yellow Card’ con respecto a las vacunas contra la Covid-19, la MHRA sostiene que “el número y la naturaleza de las sospechas de reacciones adversas notificadas hasta ahora no son inusuales en comparación con otros tipos de vacunas de uso habitual”. La agencia insiste en que la experiencia con la seguridad de las vacunas coincide con lo expuesto en los ensayos clínicos y que es algo que se supervisa continuamente.

Notificar efectos secundarios

En este informe, también se enlaza al documento que recoge todas las notificaciones respecto a la vacuna de Pfizer y BioNTech, y aclara: “Esta información no representa una descripción general de los posibles efectos secundarios asociados con las vacunas (…) no se pueden sacar conclusiones sobre la seguridad y los riesgos de las vacunas basándose únicamente en los datos que se muestran”.

Además, como se indica en el informe, cualquier persona puede notificar una sospecha de efecto secundario a la vacuna, no sólo los sanitarios. Pero “la existencia de una notificación de reacción adversa no significa necesariamente que la vacuna haya causado la reacción sospechada”, afirma la agencia.

En el Reino Unido ha circulado otro bulo que utiliza estos informes de la MHRA y que afirma que las vacunas contra la Covid-19 han causado 460 muertes en el país. ‘Full Fact’, medio miembro del International Fact-Checking Network (IFCN), lo ha desmentido.

Para denunciar más bulos relacionados con la desinformación de las vacunas contra la Covid-19, Maldita.es dispone de un canal de WhatsApp a través del número +34 644 229 319 para que cualquier persona pueda comprobar automáticamente casos de desinformación que llegan a través del teléfono u otras vías.