El mes de abril, decisivo en el futuro del Huesca en Primera División

Los azulgranas continúan colistas de Primera División. Foto: @SDHuesca
photo_camera Los azulgranas continúan colistas de Primera División. Foto: @SDHuesca

La vida -o al menos mantenerla un tiempo- o la muerte en la máxima categoría es lo que se juega el Huesca en el mes de abril. Son un total de cinco partidos los que se disputarán en este periodo, destacando tres enfrentamientos directos: ante el Elche, el Getafe y el Alavés. Estos, a excepción de los vascos, son todos en El Alcoraz.

El primer partido de esta rueda de finales será ante el Levante, el día 2, en el Ciutat de Valencia. Viernes a las 21.00 horas para inaugurar la jornada. El aliciente de vencer es que se duerme muy cerca de los puestos de salvación, a un solo punto de distancia. La victoria es asequible para unos altoaragoneses que deben sumar tres puntos.

A continuación, llegaría el primer rival directo de los oscenses. Está programado para el viernes 9, en el estadio de El Alcoraz, a las 21.00 horas. Este es el más señalado en el calendario. Es imprescindible salir del estadio ese día con tres puntos más bajo el brazo, porque implican otros tres que no suma un rival directo.

Partido también fundamental, aunque algo más complicado, es el que les enfrenta entre semana al Atlético de Madrid en el Wanda Metropolitano. Es la jornada 31, y el Huesca también necesita vencer en Madrid. Vendrían previsiblemente defendiendo su liderato, y tampoco se pueden permitir caer: otro duelo a todo o nada.

No habrá tiempo para descansar, porque está previsto que después vuelvan a Huesca para recibir al Getafe. A pesar de que cuentan con 29 puntos, siete por encima del descenso, deben consumar esa permanencia. Sacar la cabeza de los últimos puestos es prioritario para una escuadra azulona que hace cálculos para sellar un año más en Primera División.

Y entonces viene el primer duelo directo fuera de casa, en Vitoria ante el Alavés. Mendizorroza es el lugar señalado que debe conquistar el Huesca para dejar atrás a un rival directo. Otros seis puntos en juego: tres que sumarían los de Pacheta por otros tres que dejan de sumar los vitorianos. Si añadimos el golaveraje, el partido podría ser de siete puntos.

Así se cerraría un mes donde el Huesca puede aferrarse a un clavo ardiendo o, prácticamente, sellar su sentencia a la Segunda División. Todo o nada en el mes de abril y unos oscenses que se la juegan para alcanzar su sueño.