Desmantelada una plantación de marihuana con 132 kilos de droga en una nave de Fuentes de Ebro

Las detenciones tuvieron lugar en el marco de una operación para desmantelar una plantación de marihuana a gran escala
photo_camera Las detenciones tuvieron lugar en el marco de una operación para desmantelar una plantación de marihuana a gran escala

La Policía Nacional detuvo el pasado jueves 25 a cuatro individuos, Z.Z de 43 años, J.J de 35 años, D.M de 45 años y N.O de 31años como presuntos autores de un delito de tráfico de estupefacientes. Las detenciones tuvieron lugar en el marco de una operación para desmantelar una plantación de marihuana a gran escala en una nave en Fuentes de Ebro. Allí, se encontraron más de 132 kilos de marihuana en cogollos, envasada y lista para su distribución y venta y se intervinieron 1.886 macetas con plantas en crecimiento y 2.475 macetas con los tallos recién cortados.

Los agentes, desarrollando las funciones propias de su cargo tuvieron conocimiento de la posible comisión de un delito contra la salud pública en el interior de una nave industrial ubicada dentro de una finca de la localidad de Fuentes de Ebro (Zaragoza), por lo que realizaron las gestiones pertinentes para la comprobación de tal extremo.

Los policías actuantes comprobaron in situ que de la nave descrita se desprendía un fuerte olor a marihuana y que se encontraban activados diversos ventiladores de extracción de aire. Asimismo se certificó que se había realizado un “enganche” fraudulento en la toma de agua que accede a la citada nave. Todo ello, junto al resultado de otras gestiones e investigaciones constituyeron fundados indicios de que en el interior de la instalación se estaba desarrollando la actividad de plantación de marihuana a gran escala.

Tras identificar y localizar a los presuntos responsables de esta plantación, procedieron a la detención de los cuatro individuos, realizando posteriormente la entrada y registro de la citada nave, autorizada por el Juzgado de Instrucción 3 de Zaragoza en funciones de Guardia.

En el registro se intervinieron 132,495 kilogramos de marihuana en forma de cogollo, perfectamente recolectada y envasada para su distribución y entrega a una tercera persona, que hubiera alcanzado en el mercado ilícito de estupefacientes un precio de venta de más de 230.000 euros. Considerando que dicha sustancia estupefaciente estaba destinada a ser exportada a otros países, dicha valoración económica se hubiera triplicado.

Además se localizaron en el interior 1886 pequeñas plantas de marihuana en pleno desarrollo, 2475 macetas con los tallos recién cortados y 36 bolsas de basura conteniendo recortes y despojos de plantas que arrojaban un peso de 530 kilos. Todo ello demuestra la continuidad de la actividad ilícita en el tiempo, ya que el período de crecimiento medio de este tipo de sustancia vegetal suele ser de tres meses desde que se planta hasta su recolección, dejando entrever una estacionalidad en la labor ejercida por la organización.

La nave tenía en su interior una perfecta infraestructura, contando con dos cuadros eléctricos, una descogolladora de marihuana, 104 ventiladores, 54 lámparas de calor, dos aspiradoras para envasado, 50 bidones de fertilizante, 4 aparatos de aire acondicionado, 120 macetas y otros diversos útiles e instrumentos. La inversión logística, que contaba con medios técnicos de muy alta gama, está estimada en más de 300.000 euros.

La actividad ilícita de plantación, recolección y distribución de marihuana requiere para su comisión de una distribución de personas en muy diversas tareas, como la compra de semillas, la plantación y cuidado de la misma, el envasado al vacío de la mercancía recolectada, su distribución a un punto de suministro y la ocultación del dinero obtenido por su venta para no ser detectado por la Autoridad , encontrando en este caso un total de cuatro trabajadores, no descartando la existencia de más miembros pertenecientes a esta organización criminal.

Asimismo, los agentes pudieron corroborar y certificar tras realizar las gestiones pertinentes, que los presentados ante la Autoridad Judicial estaban cometiendo además un delito de defraudación de fluido eléctrico.

Los cuatro detenidos no estuvieron identificados hasta el momento de la detención, que se precipitó ante la fundada sospecha de que pudiesen huir para evitar la actuación policial y judicial. Los presuntos autores fueron puestos a disposición del Juzgado de instrucción en funciones de Guardia, quien ordenó el ingreso en prisión para el responsable de la organización y la puesta en libertad para los tres restantes.