Cientos de personas se han manifestado este sábado en Zaragoza reivindicando soluciones al problema existente con la vivienda en el país y en contra de las medidas anunciadas por el Gobierno español de bonificar en los impuestos a los propietarios de vivienda en alquiler. Unas medidas que se enmarcarían dentro de la nueva Ley de Vivienda, que los colectivos afectados ven insuficiente. Una manifestación que se ha repetido en Huesca y en la mayoría de ciudades españolas.
Desde la Plataforma de Afectados por la Hipoteca Zaragoza (PAH) afirman que la emergencia habitacional continúa siendo un problema “tremendo” y que se agravará con la pandemia. Una de las portavoces de la PAH, Naiara Valero, ha añadido que en la capital aragonesa existen hasta ocho años de espera para recibir un piso de Zaragoza Vivienda. Un problema que, según han indicado, se agrava en la población joven, en su mayoría “precaria” y con graves dificultades para “emanciparse de casa de sus padres”.
Otra de las organizaciones presentes, el Sindicato de Inquilinas, ha acusado al ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, de que, con la medida de bonificar a los arrendadores, “solo beneficia a los grandes tenedores” y que “desfavorece a los alquilados, alargando aún más la brecha existente”. La portavoz de Stop Desahucios, Concha Cano, ve con preocupación el final del estado de alarma el 9 de mayo y con el la paralización de desahucios.
Cano augura que las Administraciones no está proponiendo alternativas a los desahucios y que “llegarán en cadena y serán impresionantes”.
