Bajo la demanda de una sanidad pública, gratuita, universal y de calidad, decenas de personas se han dado cita este sábado en la plaza del pilar de Zaragoza. Una concentración que se enmarca dentro de la convocatoria estatal para este 27 de febrero exigiendo este tipo de sanidad y recordando que “no son necesarios más hospitales privados”.
Para Daniel Jiménez, miembro de CGT Sanidad, “el propósito de esta concentración es seguir reivindicando una sanidad pública de calidad para todas las personas y más ahora con la pandemia de la que muchos ayuntamientos y DGA se han aprovechado para seguir privatizando servicios”. Jiménez se ha referido a la construcción del nuevo hospital de Quirón en Gómez Laguna, del que ha dicho “la sociedad no lo necesita”. “Ahora mismo hay más hospitales privados que públicos”, ha lamentado.
Además ha asegurado que es necesario cubrir todas las vacantes, fundamentalmente las de pueblos o zonas de difícil cobertura como Teruel o los Pirineos. “No se cubren. Se están ofreciendo unos puestos muy precarios con contrataciones mensuales o incluso de menos tiempo”, ha explicado. También ha exigido una farmacéutica pública “para eliminar las patentes y que las vacunas contra la Covid no sean un negocio y lleguen a toda la población”.
Desde la Plataforma contra la Privatización de la Sanidad, David Ubico ha denunciado el uso que se le va a dar a los 8.000 millones de fondos europeos. “Están endulzándolo diciendo que van a ir a servicios y ayudas pero todo se va a gestionar por empresas privadas. La CEOE y distintos empresarios ya están organizando como se van a repartir el pastel”, ha lamentado. Además ha denunciado “la conveniencia entre el Gobierno, silenciando todo este pastel que se va a repartir y sin hacer nada por la derogación de la ley 15/97, que permite que la empresa privada entre en la sanidad pública”.
“No solamente se han manifestado la importancia de la publica sino que ha sido esta la que nos ha salvado de muchos más de miles de muertos”, ha continuado, recordando que “ha habido una masacre en la actitud de las residencias privadas y la no colaboración de los hospitales privados cuando en una situación de emergencia habría que haber puesto todos los servicios sanitarios al servicio de una emergencia nacional”.
