Los empresarios de la fruta deberán acreditar el alojamiento y contrato de los temporeros

La orden obliga a los empleadores a comunicar las previsiones de contratación de trabajadores agrarios temporales antes del inicio de la campaña
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Los empresarios frutícolas de Aragón tendrán que rellenar una declaración responsable con los detalles de los temporeros. Así lo recoge la orden que se ha publicado este jueves en el BOA, y que obliga a que se rellene un formulario que especifique el contrato y el alojamiento de los trabajadores que se vayan a incorporar a la campaña de recogida de la fruta.

Esta actividad, y especialmente las condiciones de habitabilidad de los temporeros, ya provocó un importante repunte de los contagios en los meses de junio y julio del pasado 2020, iniciando la segunda ola de la pandemia durante el verano. Por ello, el Ejecutivo autonómico y las organizaciones agrarias están poniendo todos los esfuerzos en que esta campaña sea “ejemplar” y que “se lleve a cabo con total seguridad, sin ningún problema sanitario”, ha reconocido el consejero del ramo, Joaquín Olona.

El responsable de Agricultura y los mandatarios de Sanidad, Sira Repollés, y Economía, Marta Gastón, han reunido este jueves a los líderes de las principales organizaciones para seguir avanzando en la puesta en marcha de esta orden. “Podemos hacer mucho no haciendo llamamientos ni provocando la llegada de más trabajadores de los que estrictamente se necesitan, y preocupándose de constatar que el temporero tiene las condiciones de alojamiento adecuadas”, ha instado Olona.

La orden obliga a los empleadores a comunicar las previsiones de contratación de trabajadores agrarios temporales antes del inicio de la campaña, a través de la presentación de una declaración responsable. En ella, el empleador se compromete expresamente al cumplimiento de las condiciones y requisitos laborales y sanitarios exigibles y a velar por las adecuadas condiciones de alojamientos y de transporte de sus trabajadores desplazados. Asimismo, el empleado solo podrá desplazarse con una declaración responsable sujeta a un contrato de trabajo y donde figure su domicilio.

Para ello, además estas medidas preventivas, el Ejecutivo autonómico intensificará las inspecciones en las explotaciones agrícolas y trabajará de forma conjunta con el resto de las administraciones para incrementar los controles en las zonas donde se concentran los trabajadores temporales. Como en el resto de las actividades económicas del ámbito privado, son los empleadores quienes tienen la responsabilidad y la obligación de adoptar los medios y medidas necesarias, no sólo para llevar a cabo la actividad productiva, sino para que dicha actividad cumpla con las exigencias legales en seguridad y salud.

Precisamente, la vivienda de los trabajadores ha sido el principal punto discordante entre el sector, que ha dado su “compromiso y colaboración” la importancia de cumplir adecuadamente la normativa. El secretario general de UAGA, José María Alcubierre, ha incidido en que este problema “no se soluciona de una manera única”, pidiendo también un esfuerzo a las instituciones para ofrecer una respuesta adecuada. “Muchos trabajadores tienen contratados alojamientos de una manera histórica, y otros tienen que encontrarlos de manera privada o con colaboración público-privada. Allí es donde tenemos que avanzar. Quedan muchos planteamientos que debemos ir ganando poco a poco”, ha remarcado.

Una posible alternativa que ha dado el secretario general de Asaja, Ángel Samper, es habilitar alojamientos dignos dentro de las propias explotaciones. “Hay empresas que pueden realizarlos dentro de las explotaciones. Se evita el riesgo de contagio porque no habría interacciones, aunque debería haber voluntad presupuestaria por las administraciones para abordarlo”, ha expuesto, afirmando que esta solución sería más a largo plazo.