El ministro de Sanidad, Salvador Illa, insistió este sábado a los españoles en que hay que “quedarse en casa” esta Navidad y reducir al máximo los contactos, pese al “horizonte de esperanza” que dibujan las vacunas que, previsiblemente, comenzarán a administrarse en enero entre los más vulnerables al coronavirus.
“Podemos decir que estamos en el principio del fin, pero es importante que mantengamos la guardia alta en estos próximos meses y, especialmente, en estas semanas de Navidad”, declaró el ministro desde la sede del PSOE en la calle Ferraz.
En este sentido, subrayó el “llamamiento a todos los españoles a quedarse en casa”, pese a que reconoció que “las vacunas dibujan un horizonte de esperanza”.
“Muy pronto, gracias a la estrategia comunitaria de vacunación, podremos empezar a administrar las vacunas eficaces a los ciudadanos españoles”, continuó. “Es un éxito de Europa. Llevamos meses trabajando con las comunidades autónomas para que enseguida estén las vacunas en cuanto estén aprobadas por la Agencia Europea del Medicamento”.
Asimismo, dijo que “gracias al esfuerzo de todos los españoles, estas últimas semanas hemos visto cómo estamos doblegando la curva de la segunda ola”. No obstante, ayer se registró un leve aumento en la transmisión del coronavirus a nivel nacional tras más de un mes reduciendo la incidencia, lo que implica un cambio de la tendencia descendente.
