El Ayuntamiento de Zaragoza intervendrá en el desalojo de delincuentes en el Gancho

Operación policial en el Gancho que se llevó a cabo la semana pasada
photo_camera Operación policial en el Gancho que se llevó a cabo la semana pasada

El Ayuntamiento de Zaragoza intervendrá en el desalojo de las viviendas con problemas de orden público y donde se vendan drogas en el entorno de la calle Pignatelli. A lo largo de este mes se pondrán en marcha cuatro cámaras de videovigilancia.

El responsable de Urbanismo, Víctor Serrano, ha presentado este martes el Plan Especial de Protección de la zona Zamoray-Pignatelli, que contempla mejoras en seis calles de la zona, un museo de restos andalusíes y la residencia para estudiantes de Pontoneros, entre otras cuestiones.

Serrano ha insistido en que el Ayuntamiento intervendrá en los desalojos con todos los instrumentos que permita la ley y que se centrarán en personas que alteren el orden público y estén delinquiendo en los pisos.

Según ha explicado Serrano, el Consistorio emprenderá acciones legales contra aquellos que perturban la convivencia y confía en contar con colaboración de la Delegación del Gobierno.

“Tenemos que intervenir ya. No podemos permitir que una zona emblemática se nos vaya de las manos. Corremos riesgo de eso. Tenemos que lanzar un mensaje de tranquilidad a los vecinos y decirles que sus administraciones están trabajando”, ha sostenido.

El responsable de Urbanismo ha asegurado que el Ayuntamiento se centrará “única y exclusivamente” en desalojar a los delincuentes y ha añadido que Zaragoza Vivienda y el vecindario sabe “perfectamente” donde están los pisos más conflictivos.

El concejal presidente de la Junta Municipal del Casco Histórico, Alfonso Mendoza, ha destacado la puesta en marcha de cuatro cámaras de videovigilancia, que se activarán cuando dé la autorización la Delegación del Gobierno en Aragón. Mendoza ha apuntado que si la medida es efectiva, se instalarán más en otras calles de la zona degradada.

Mejoras en seis viales y un museo de restos andalusíes

El Plan Especial Zamoray-Pignatelli propone la creación de un equipamiento cultural ligado a la musealización de los restos andalusíes hallados a ambos lados de la calle de la Escopetería y en la plaza de Forqué, que se vinculará al Área de Cultura del Ayuntamiento de Zaragoza.

Podrá incluir alguna sala dedicada a la historia del área y otros servicios complementarios, y en su diseño se procurará un mejor entronque de Escopetería con la plaza, favoreciendo la permeabilidad desde ésta hacia la calle de Pignatelli.

En segundo lugar, la creación de una gran residencia de estudiantes que ocupe el edificio de viviendas de oficiales del antiguo cuartel de Sangenís (conocido como Pontoneros) y la parte del edificio castrense no ocupada por el Área de Cultura.

Y, en tercer lugar, se habilitarán, dentro del tejido residencial de la zona ARRU, pequeños locales o edificios dedicados a servicios públicos y, muy especialmente, a los vinculados a la asistencia y el bienestar social (residencias y pisos tutelados para ancianos, jóvenes, guarderías…), campo en el que se verifican las mayores carencias dotacionales del polígono y también las mayores necesidades de su población.

El responsable de Urbanismo, Víctor Serrano ha destacado que si el plan sale adelante a corto plazo habrá obras de mejora en el entorno de la Iglesia de Santiago, plaza Forqué, Ramón y Cajal, Madre Rafols, Pignatelli, Mayoral y Cereros. Habrá nuevas plazas, mejora de mobiliario urbano, pavimentación e iluminación.

El plan de Pignatelli costará 22 millones en su totalidad. Serrano intentará contar con el apoyo de los grupos municipales para sacar adelante este plan en la Comisión de urbanismo de enero.