Aragón se propone reabrir la línea Zaragoza-Pau por Canfranc en 2025

Sería el primer paso para la rehabilitación de esta línea internacional, y que se completaría en 2040, cuando toda la vía, de 312 kilómetros, esté electrificada
photo_camera Sería el primer paso para la rehabilitación de esta línea internacional, y que se completaría en 2040, cuando toda la vía, de 312 kilómetros, esté electrificada

Objetivo 2025. Es el “horizonte máximo” que el consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, se ha marcado para tener reabierta la línea ferroviaria Zaragoza-Canfranc-Pau, tanto para transporte de viajeros como para mercancías. Sería el primer paso para la rehabilitación de esta línea internacional, y que se completaría en 2040, cuando toda la vía, de 312 kilómetros, esté electrificada.

Unos plazos de máximos que, no obstante, vendrán supeditados a la financiación que debe llegar desde el mecanismo Conectar Europa, que ya ha entregado 17,4 millones de euros de la convocatoria de 2016 para los estudios y las primeras obras, aunque el consejero no ha querido aventurarse a dar un montante total para la inversión. “Soy optimista, porque todos los fondos europeos buscan una doble transición digital y ecológica, y la forma de hacer esa transición ecológica en el transporte es sacando la mercancía de las carreteras y llevándola al ferrocarril”, ha señalado Soro.

Toda esta inversión supondrá además dejar atrás esa “visión de dos líneas sucesivas que no están conectadas”, como ocurría en 1970 cuando se cierra la línea. “Un tren subía cargado de mercancía o pasajeros hasta Canfranc, y los pasajeros se bajaban del tren y se subían a otro porque eran dos vías y no solo una”, ha recordado Soro, remarcando que ahora será “una única línea exactamente igual en parámetros de interoperatibilidad”.

El consejero ha comparecido este lunes ante los medios para dar a conocer los detalles técnicos de esta conexión. En concreto, será una única vía, electrificada a 25kv, con un ancho de estándar europeo, una carga máxima de 22,5 toneladas/eje y una longitud máxima de 160 metros para los trenes de viajeros y de 450 metros para los de mercancías. Además, se han previsto paradas de trenes de viajeros en Canfranc y Oloron, y un apartado de mercancías en Canfranc.

Aun así, está previsto que, si se consigue reabrir la línea en 2025, se mantengan los apartaderos actuales de 300, y que los de 450 metros lleguen en 2030. “En algunos casos ya existen los apartaderos de 450 metros, pero en otros solo tienen para trenes de 300 metros, lo que circula ahora. Esto solo afectaría a la longitud de los trenes de mercancías. Cuanto más largo es el tren, más rentable para la operadora es transportarlas”, ha señalado el consejero.

Este proyecto se ha desarrollado de forma conjunta entre los Ministerios de Francia y España, la región de Nueva Aquitania, la Comunidad Autónoma de Aragón y ADIF. SCNF-R actúa como organismo de ejecución del Ministerio francés y Plhus, Plataforma Logística SL y la Fundación Transpirenaica como entidades afiliadas.