Llega el 5 de octubre, fecha intrascendente en cualquier temporada a nivel futbolístico, pero que en 2020 supone el cierre del mercado de fichajes. Y un día más tarde, como viene siendo habitual en el Real Zaragoza, toma la palabra el director deportivo. Ha sido en la sala de prensa donde Lalo Arantegui ha explicado nadie puede ganar a la plantilla “a humildad y trabajo”.
Según ha explicado el director deportivo, el conjunto maño no puede pensar que es “favorito”. Esto se debe a que hay “trasatlánticos” en la competición –término muy utilizado por Víctor Fernández- que acaparan prácticamente todos los ingresos. Las ayudas por el descenso, la distribución de las deudas de cada equipo, los escasos gastos, los ingresos de televisión… El desigual reparto de los recursos ubica a los zaragozanos entres los conjuntos con menos presupuesto.
Aun así, el Real Zaragoza es el Real Zaragoza, y su objetivo es pelear por lo máximo, que es ascender a Primera División. Para ello se ha confeccionado una plantilla con 25 jugadores, que tiene varios aspectos positivos. En primer lugar, permite tener un gran fondo de armario, y por otro lado, este hecho les mantendrá activos si quieren tener minutos. “Con 25 jugadores, el que se duerma saldrá del equipo”, ha asegurado.
Por ello, no se muestra preocupado. Sobre el terreno de juego se han logrado dos empates, que pueden convertirse en un empate y una victoria por alineación indebida. Además, hay algunos que irán entrando “poco a poco” y otros que “se tienen que poner en forma”. “Para la forma de jugar que tenemos, hay mucha alternativa en todos los puesto”, ha declarado sobre esta cuestión.
En este mismo sentido, ha dejado claro que “nunca existe un año de transición”. Además, ha llamado a tener buenas vibraciones, ya que percibe “negatividad”. “Parece que todo está mal. Tenemos tendencia a ser poco optimistas”, continuaba. El equipo debe creerse que puede, en el buen sentido de la palabra, y empezar a sumar de tres en tres.
Kagawa y Raí
Una de las cuestiones que suscitaba interés en el entorno zaragocista era la rescisión de contrato de Shinji Kagawa. Y ahí, Lalo Arantegui ha vuelto a dar una explicación. Según ha declarado, el japonés contaba con varias ofertas de equipos que pagaban traspaso. Sin embargo, no se aceptaron. La decisión de echar al nipón es por un aspecto deportivo debido a su rendimiento, pero le han cedido la Ciudad Deportiva para que pueda seguir entrenando.
Por su parte, Raí pasó un año y medio en Ibiza, donde dejó buenas sensaciones en Segunda División B. Baraja le quiso ver, y decidió que era un futbolista válido para el primer equipo. Por ello, se decidió renovarle hasta 2023 y será un efectivo más en el plantel de Baraja.
