La antigua fábrica Giesa busca nuevos usos municipales tras vaciarse de cuatro mil toneladas de residuos

El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, ha visitado las instalaciones este lunes
photo_camera El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, ha visitado las instalaciones este lunes

La antigua fábrica Giesa en Zaragoza sigue avanzando en su reconversión a un espacio municipal. Después de adecuar las instalaciones eliminando más de cuatro mil toneladas de escombros y residuos peligrosos para la salud, el Ayuntamiento de Zaragoza estudia ahora qué equipamientos municipales podrían instalarse, con opciones como zonas deportivas, culturales o de formación.

El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, ha visitado este lunes la fábrica, de más de 9.000 metros cuadrados y ubicada en pleno corazón del barrio de Montemolín, en el Distrito de Las Fuentes. Allí, Azcón se ha mostrado partidario de repartir el espacio disponible para crear diferentes instalaciones. “Con tantos metros cuadrados, cabe todo”, ha indicado.

Así, el primer edil ha citado algunos ejemplos de instalaciones que podrían mejorar una zona de la ciudad que ya se encuentra en “revitalización”. Desde espacios deportivos a otros educativos y de formación profesional, Azcón ha asegurado que cualquier decisión final sería antes consensuada con la Junta de Distrito de Las Fuentes.

Su presidente, el concejal socialista Horacio Royo ha visitado también la fábrica Giesa junto al alcalde, al que ha trasladado algunas de las ideas que la Junta baraja para el espacio. “Hemos hecho un proceso participativo para definir un plan director con el que aspiramos a que la antigua fábrica se convierta en un centro con espacios comerciales, viviendas o un auditorio que sea de referencia para la ciudad”, ha señalado Royo.

No perder el “impulso inversor” pese a la situación económica de la ciudad

Tras conocer de primera mano el estado de la fábrica, Jorge Azcón se ha mostrado convencido de las posibilidades de esta instalación, para la que ha destacado la necesidad de que el proyecto no pierda su “impulso inversor” pese a la situación económica de la ciudad.

“Es necesario que no vuelva a caer en una paralización y que aunque la situación del Ayuntamiento de Zaragoza no sea en estos momentos la mejor, sería deseable que las naves de Giesa no volvieran a caer en el olvido”, ha finalizado el alcalde.