El Ayuntamiento de Zaragoza finalizará en los próximos días la renovación de varias calles del barrio de La Magdalena, en las que se mejora la accesibilidad y se gana espacio para el peatón. Los principales trabajos se han llevado a cabo en la calle de Torrellas y en la plaza de Asso, que hasta ahora tenían aceras estrechas que dificultaban el tránsito de personas con movilidad reducida y una calzada adoquinada por la que circulaban los vehículos.
En una visita a las obras, la consejera de Infraestructuras, Patricia Cavero, ha destacado que los trabajos han permitido crear dos calles de plataforma única en las que tendrán prioridad los peatones. Además, las aceras son mucho más anchas y están situadas al mismo nivel que la calzada.
Cavero ha explicado que se da continuidad a las mejoras de accesibilidad que ya se habían llevado a cabo en otras calles del entorno. Además, la plaza de Asso pasa a ser un espacio peatonal, dado que hasta ahora estaba bordeada por la calzada adoquinada.
También se ha actuado en la calle de la Universidad, una de las que ya contaba con plataforma única. En este caso se ha eliminado el adoquinado de la parte central porque estaba muy deteriorado y se ha sustituido por una banda de hormigón coloreado. A pesar de que es una calle de tráfico restringido y sólo se puede acceder a los garajes, el paso de vehículos había estropeado el pavimento, con el consiguiente riesgo de tropezones caídas y ruidos.
El área de Infraestructuras ha invertido 150.000 euros en la renovación de estas calles con el objetivo de hacer más seguras, accesibles e inclusivas para las personas mayores o con discapacidad. Los trabajos comenzaron a finales de julio y concluirán en los próximos días, una vez que finalicen los remates en los pasos de peatones y otros elementos.
Renovación en Almadieros del Roncal
A lo largo de esta semana también está previsto que finalicen las obras de mejora que se han estado llevando a cabo a lo largo de este mes en la calle de Almadieros del Roncal, en el Arrabal.
En este caso, Infraestructuras ha renovado parte de la red de abastecimiento de agua, sustituyendo dos tramos de tubería de fibrocemento de 115 metros y 100 metros, respectivamente. En su lugar, se ha colocado material de función dúctil, que evitará las fugas y roturas que venían produciéndose.
Los trabajos se han desarrollado en el tramo comprendido entre la avenida de San Juan de la Peña y Valle de Oza y se ha aprovechado para eliminar barreras arquitectónicas y actuar sobre los pasos de peatones. La obra ha supuesto una inversión de 50.000 euros.
