El Gobierno reafirmó este jueves a través de las ministras de Asuntos Económicos y Trabajo su idea de continuar, a partir de septiembre, con la aplicación de los ERTE con los criterios actuales de protección de empleo solo en los sectores más dañados por el coronavirus, como es el caso del turismo.
En declaraciones a Antena 3, recogidas por Servimedia, Calviño dijo que se buscará de nuevo el acuerdo con los agentes sociales en las conversaciones que se abrirán en los próximos días, pero “tenemos que pensar si a partir de septiembre hay que continuarlo en algunos sectores más afectados, e irlo transformándolo en un instrumento de reacción y protección de choque de corto plazo, a uno con características más parecidas a las de Alemania, un instrumento que fomente que se invierta en formación de los trabajadores, que sea una oportunidad de recualificación del trabajador y no solo de mantenimiento o hibernación de la economía”.
En países como Alemania se han puestos en marcha mecanismos a más largo plazo de ajustes de horarios en plantillas enfocados a la formación y la digitalización.
Por su parte, la titular de Trabajo, Yolanda Díaz, dijo en otra entrevista en RNE, recogida por Servimedia, que de los 3,4 millones de trabajadores que se acogieron a ERTE solo quedan unos 700.000 y “los tenemos localizados en sectores concretos, por lo que no tendría sentido prorrogar” la medida de los ERTE con carácter general para el conjunto de la economía, aunque subrayó que su departamento no encara con “líneas rojas” las nuevas conversaciones con patronal y sindicatos.
A Nadia Calviño se le preguntó por el cobro en los ERTE y si hay fraudes. Dijo que “por supuesto” que se están pagando y “nuestro objetivo es que lo cobre todo el mundo que tiene derecho a ello”, pero el Gobierno está vigilante.
Señaló que “se está siguiendo muy puntualmente las circunstancias de las empresas para evitar el fraude, que es posible que se esté dando en el ámbito de algunas empresas de nuestro país”. “El Ministerio está haciendo inspecciones y viendo que los ERTE se pagan a las empresas que tienen necesidad y reúnen los requisitos, porque esto es un esfuerzo fiscal muy importante que tiene que ir dirigido a los sectores que lo necesitan, no a quien no lo necesita”, remarcó la vicepresidenta tercera.
