Hambre y energía. Esas han sido las palabras más repetidas en la presentación de Rubén Baraja como nuevo entrenador del Real Zaragoza. Para el técnico vallisoletano, son los ingredientes principales de su nueva aventura en los banquillos, una oportunidad “que tengo que tratar de aprovechar”. “Lo que me planteo es estar a la altura de la exigencia y la grandeza de este club”, ha defendido el técnico, que ha ofrecido también algunas pinceladas tácticas y se ha referido a nombres propios como el de Raúl Guti o Dani Lasure.
“Es un club que representa mucho para el fútbol español, entrenar al Real Zaragoza es un reto y lo acepto así. Solo podemos prometer trabajo e intentar sacar el máximo rendimiento a la plantilla” ha esbozado Baraja, que se ha referido a la posibilidad que se le presenta ahora en la capital aragonesa. “Trataremos de transmitir a los jugadores nuestra energía y hambre para tratar de conseguir el objetivo”, ha subrayado.
Gran conocedor del fútbol español como jugador y entrenador, “el Pipo” ha dicho no asustarse ante la misión que tiene enfrente. “Me vais a escuchar continuamente decir que no busco excusas, siempre pienso que a partir del trabajo se puede crecer”, ha avanzado. Eso sí, no ha ocultado que hay que acertar con los refuerzos que lleguen: “debemos ser certeros para ser competitivos y hacer un equipo con unas características muy definidas, para ser un equipo difícil y tener la regularidad necesaria para estar más cerca del objetivo”.
En esas características está el empleo de un sistema 4-4-2, que puede mutar a un 4-2-3-1 dependiendo del perfil de los jugadores que utilice. “Tenemos que ser un equipo sólido, comprometido con el trabajo y a nivel defensivo. Eso siempre te da la posibilidad de mantenerte con opciones en los partidos”, ha expuesto. Con la pelota, Rubén Baraja quiere que su equipo “sea protagonista, genere ocasiones y marque la diferencia”, y ha destacado la versatilidad como otro factor clave. “Se trata de aprovechar nuestros registros para ser competitivos en cada partido”, ha apuntado.
Buena base en la plantilla
A pesar de que ha dicho ser conocedor de las limitaciones de la economía zaragocista a la hora de diseñar la plantilla, el preparador ha valorado que “hablamos de una buena base, con jugadores que ya saben lo que es jugar para el Real Zaragoza y que en los últimos años ha rozado dos veces la posibilidad de ascender”. “El trabajo en años anteriores siempre ha sido bueno, el objetivo no se consigue de un día para otro y los ocho años en Segunda hablan de la dificultad que tiene”, advertía.
Con buena parte de la estructura ya definida, los esfuerzos se centran ahora en la parcela ofensiva, donde escasean los efectivos y el club trata de cerrar a jugadores que sean “diferenciales”. No obstante, la cantera volverá a ser el recurso habitual. “Creemos mucho en la gente joven que tiene ganas de crecer, hay que ser valientes para ponerlos pero no podemos cargarles con una gran responsabilidad, tenemos que darles sus momentos y sus espacios”, ha expuesto el excentrocampista.
“Me gustaría contar con Guti pero no está en nuestra mano”
El nuevo técnico blanquillo ha incidido en la importancia de aprovechar el tiempo nada más volver de las vacaciones para empezar a preparar la nueva temporada, muy próxima en el tiempo. En esa vuelta estará presumiblemente Raúl Guti, aunque no se esconde que es un jugador con cartel en Primera y que podría salir si llega una oferta irrechazable. “Me gustaría contar con él pero es algo que no está en nuestra mano, el buen rendimiento siempre genera la atracción de otros equipos y es una posibilidad que está ahí”, ha reconocido.
En el arranque de los entrenamientos, Rubén Baraja se reencontrará con Dani Lasure, cedido a su Tenerife en la segunda mitad de la pasada campaña, donde gozó de protagonismo. Sin embargo, el técnico hablará primero con él para saber su deseo para el futuro. “Ha crecido en esta casa desde abajo, hablaremos con él y valoraremos qué es lo mejor para su futuro, bien sea aquí o en otro lugar”, ha explicado.
