La plaza de Santa Engracia será peatonal y acogerá el espacio homenaje a las víctimas del Covid

Desde el Consistorio esperan que los trabajos puedan empezar en el mes de octubre
photo_camera Desde el Consistorio esperan que los trabajos puedan empezar en el mes de octubre

La Plaza de Santa Engracia se convertirá en un espacio accesible para el disfrute de los peatones en el que los elementos naturales compartirán protagonismo con la portada renacentista de la basílica. El Ayuntamiento de Zaragoza va a llevar a cabo una reforma integral de este espacio urbano, en el que, además, se rendirá homenaje a las víctimas del Covid-19. Desde el Consistorio esperan que los trabajos puedan empezar en el mes de octubre y durarán aproximadamente cuatro meses.

El alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, y la vicealcaldesa, Sara Fernández, acompañados por la consejera de Infraestructuras y Medio Ambiente, Patricia Cavero, han presentado este viernes el proyecto para poner en valor esta céntrica plaza. La reforma tendrá un coste de 700.000 y se realizará en base a criterios de accesibilidad y ambientales, en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030: avanzar hacia una ciudad más inclusiva, segura, resiliente y sostenible, más atractiva para la movilidad peatonal y más saludable y natural.

En cuanto al espacio homenaje a las víctimas del Covid, el Gobierno municipal, pese a no tener pensado el emplazamiento definitivo, sí prevé que finalmente podría ser colocado a pocos metros de la fachada de la Basílica, a mano derecha si se accede a la plaza desde el Paseo de Independencia.

“Esta reforma se ha pensado con muchos objetivos, pero uno de ellos, prioritario, es realzar la basílica de Santa Engracia, enfocado en la fachada central”, ha explicado Azcón, destacando que las zonas de estacionamiento de vehículos, motos y bicicletas, y también las señales de tráfico, la cabina de teléfono y otros elementos serán eliminados, en lo que el primer edil ha definido como “posiblemente la mayor obra de peatonalización desde que el alcalde Atarés hiciera lo propio con la calle Alfonso”.

La reforma ampliará el espacio para uso peatonal y ofrecerá un entorno más armónico con la basílica y otros edificios de interés del entorno. La plaza pasará a ser de plataforma única, eliminando los problemas de accesibilidad existentes actualmente entre la glorieta central y las aceras. Además, los árboles y zonas ajardinadas tendrán mucho más protagonismo, dando continuidad al eje verde entre la plaza de los Sitios y los tilos del Paseo Independencia. Así se dotará a la plaza de zonas sombreadas que inviten a detenerse y ofrezcan vistas interesantes desde múltiples ubicaciones.

La pavimentación se realizará además con un sistema de drenaje urbano sostenible para favorecer la permeabilidad y respiración del suelo, ya que eso mejorará la oxigenación y aporte de humedad que necesitan las raíces del arbolado y del resto de las plantas. Esto supondrá una mejora sustancial ya que actualmente todo el pavimento es impermeable y sólo existe un sumidero para recoger las escorrentías.

La intervención incluirá la renovación de todos los servicios urbanos que discurren por la plaza, como las tuberías de distribución de agua y de saneamiento o el alumbrado público, que se sustituirá por tecnología LED. Ello permitirá un menor consumo energético y reducirá la contaminación lumínica.