El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Caspe, incluida la alcaldesa, Pilar Mustieles, se encuentra desde la pasada semana como máxima medida preventiva en cuarentena domiciliaria, después de que una de las ediles diera positivo en Covid-19. Según ha confirmado la propia alcaldesa a Aragón Digital, este mismo lunes los siete miembros de la corporación han conocido los resultados de su prueba diagnóstica: a expensas de que se les practique un nuevo test serológico que confirme al 100% sus estados y niveles reales de anticuerpos, todos han salido, en inicio, negativos, excepto uno de ellos. Así, siguiendo el protocolo sanitario, el Gobierno caspolino permanecerá en casa hasta cumplir con los 14 días reglamentarios.
Todos los trabajadores del Consistorio, unos 150 en total, también van a someterse a pruebas PCR en los próximos días. Sin embargo, la alcaldesa ha aclarado que este cupo de test estaba ya previsto dentro del reconocimiento médico anual. Fueron incluidos y financiados por el propio Ayuntamiento, al desatarse la situación de pandemia.
La alcaldesa, quien ha asegurado que tanto ella como su equipo “nos encontramos bien”, ha querido recalcar que durante las próximas jornadas “tocará volver al teletrabajo” para seguir ejerciendo su función gubernamental. Entre ellas, la gestión del rebrote en su municipio, donde se registraron el fin de semana anterior unos 15 positivos. Al parecer, lo contrajeron en varias reuniones de amigos que llegaron a celebrarse entonces.
En cualquier caso, Mustieles ha asegurado que el foco está “bastante controlados” y que la población de Caspe muestra ahora mayor capacidad de concienciación que en días anteriores. Aun así, en el momento en que Aragón impusiera el uso obligatorio de la mascarilla, hace ahora una semana, el consistorio decidió hacerse con un cargamento de 20.000 mascarillas para repartir gratuitamente entre sus ciudadanos a lo largo de esta semana.
