Soy maestra y cuando por las mañanas me conecto a la plataforma para comunicarme con mis alumnos se me viene el mundo encima y no dejo de llorar.

El cierre de colegios, institutos y universidades fue una de las primeras medidas estipuladas para la contención del Covid-19. Frente a este hecho se ha cambiado el enfoque didáctico, llevando a cabo la iniciativa de continuar impartiendo clases a través de los diferentes medios online.

La situación docente actual supone adaptarse y afrontarla con paciencia, hay que focalizarse en valorar los aspectos positivos que trae consigo esta nueva orientación. Por un lado, se está fomentando la autonomía de los alumnos poniendo a prueba su madurez y su grado de responsabilidad, también están desarrollando sus capacidades organizativas, cumpliendo con horarios y realizando las tareas a pesar de carecer de la presencia de sus profesores. Además, no hay que olvidar que esta dinámica permite poder seguir en contacto e interactuar con los alumnos a diario.

Cuando sientas nostalgia, antes de conectarte a la plataforma, haz un ejercicio de conciencia, visualiza la situación adelantándote a los hechos, identifica tus emociones y canalízalas tratando de transformar los pensamientos negativos en positivos. Recuérdate que se trata de una medida temporal y que los alumnos te necesitan inspirada y entregada.

Mi consejo: Es importante transmitir un mensaje motivador, donde tanto profesorado como alumnado tienen que dar lo mejor de sí en esta situación.

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