El Ayuntamiento apela a la concienciación ciudadana para no alimentar a los animales en la calle

Se han instalado 27 placas en 15 plazas y otros lugares para recordar que la Ordenanza Municipal prohíbe alimentar a animales en la vía pública
photo_camera Se han instalado 27 placas en 15 plazas y otros lugares para recordar que la Ordenanza Municipal prohíbe alimentar a animales en la vía pública

El Ayuntamiento lleva tiempo trabajando en la concienciación ciudadana para que los vecinos no alimenten a los animales en las calles y riberas. “La gente piensa que se lo va a comer un gatito, pero son los roedores quienes se alimentan primero, causando un descontrol poblacional de ratas, en este caso”, ha explicado consejera municipal de Servicios Públicos y Movilidad, Natalia Chueca, en un paseo por la ribera del río Huerva. Ahora, el Consistorio ha intensificado la limpieza en las zonas en las que se acumula la comida que dejan los vecinos y también se han instalado 27 placas en 15 ubicaciones para recordar que la Ordenanza Municipal prohíbe alimentar a animales en la vía pública.

Chueca ha reconocido que cada vez hay más quejas ciudadanas por presencia de roedores en varios puntos de la ciudad. Otra de las medidas tomadas ha sido la creación de un grupo de trabajo transversal que, liderado por el Instituto Municipal de Salud Pública, con técnicos de Medio Ambiente, Parques y Jardines, Limpieza y Protección Animal, “para estudiar entre todos la problemática y encontrar soluciones para controlar las plagas evitando que sea un problema de salud pública”.

En este sentido, el objetivo es evitar que crezca el número de animales descontrolados para que no generen problemas de salud y enfermedades. Pero otra de las causas de haber llegado esta situación, ha argumentado Chueca, es que los gobiernos anteriores “no han actuado en esta materia, y no han dejado a los técnicos hacer su trabajo, lo que ha llevado a una proliferación descontrolada”.

Para solucionar el problema, lo primero que ha hecho el Ayuntamiento es limpiar los restos de comida porque los roedores son los primeros que se los comen “y luego no caen en los cebos con raticida, porque ya están alimentados”. Además, se han limpiado todas las madrigueras y están introduciendo en ellas raticidas con unos tubos “para que caiga el producto sobre los animales, se infecten cuando se laman y podamos controlar la plaga”.

Plaga de palomas

Las riberas del Huerva y en el Canal Imperial son las zonas donde mayor problema hay en cuanto a ratas y patos. En relación con las palomas, otra de las grandes plagas de la ciudad, hay identificados más de quince puntos de la ciudad, en los que ya se han instalado a placas avisando de que no está autorizado dar de comer a los animales en la vía pública. Actualmente el censo de palomas de la ciudad es de unas 12.000, cuando la cifra “sostenible y bastante soportable” para el veterinario del Instituto Municipal de Salud Pública, Emilio Martínez, sería tener “unas 6.000 o 7.000 palomas”.

Estos puntos son: la avenida Cataluña 1, la plaza de San Gregorio, la plaza de Santo Domingo, la plaza del Portillo, la avenida de Madrid 105, la plaza de Santo Domingo Sabio, la plaza de Nuestra Señora de Las Nieves, el puente de la avenida de América, la plaza de Albert Schweitzer, la plaza Mayor, la plaza de Reina Sofía, la plaza de Utrillas, la de Los Sitios, la de San Pedro Nolasco, la plaza del Pilar a la altura de Las Murallas, dos puntos de la calle de la Marina Española y la calle de Genoveva Torres Morales.

Eso sí, Martínez ha dejado claro que no se ha “gaseado” a las palomas, sino que se ha contratado a una empresa autorizada por el Inaga, “que captura a las palomas y las reubica en cotos, halconeros”. Sobre los piensos esterilizantes, Martínez se ha referido a un informe de SEO Bird Life, “que está totalmente en contra de este procedimiento” porque “no es un método selectivo, lo puede consumir cualquier tipo de ave, es un medicamento veterinario que tiene que tener receta y seguimiento profesional, es caro económicamente y tiene problemas legales porque es un medicamento veterinario que se está utilizando como biocida”, ha explicado.