El notario turolense Honorio Romero recibe la Cruz de Honor de San Raimundo de Peñafort

Romero ha agradecido el apoyo de todos los compañeros que le han acompañado durante su carrera
photo_camera Romero ha agradecido el apoyo de todos los compañeros que le han acompañado durante su carrera

El notario turolense Honorio Romero ha recibido este sábado la Cruz de Honor de la Orden de San Raimundo de Peñafort, una de las mayores condecoraciones jurídicas que se pueden entregar en España. El reconocimiento, que ha sido entregado por la subsecretaria del Ministerio de Justicia, Cristina Latorre, reconoce así los más de 40 años de profesión de Romero desde que ingresara en Notariado 1949.

En una ceremonia celebrada en el complejo Aura de Zaragoza, la imposición de la Cruz de Honor de San Raimundo al de Santa Eulalia del Campo ha contado con la presencia de importantes figuras nacionales de la notaría, como el presidente del Consejo General del Notariado, José Ángel Martínez Sanchiz, o el decano del Colegio Notarial de Aragón, Dámaso Cruz, además de otras personalidades como el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, los decanos de los Colegios de abogados, procuradores y registradores de Zaragoza; el Fiscal Superior y el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragón.

Ninguno ha querido perderse la despedida de un Honorio Romero visiblemente emocionado durante todo el homenaje. Con la Cruz ya en su pecho, el de Santa Eulalia del Campo ha mostrado su “infinito agradecimiento” a todos los presentes en su homenaje. “No sé si lo merezco o no, pero os lo agradezco de todo corazón”, ha explicado ante una sala con varios centenares de personas.

Tras cuatro décadas de carrera, Honorio ha querido recordar también a todas las personas que durante todos estos años le han acompañado como compañeros. Muchos de ellos presentes este sábado en Zaragoza y que han contribuido a que el turolense “pueda estar hoy aquí”, como él mismo ha agradecido.

Entre sus diferentes labores a lo largo de su carrera profesional, Romero formó durante más de 30 años a jóvenes opositores a Notarías, ayudando a que cerca de 250 licenciados en Derecho consiguieran su puesto. A los jóvenes se ha referido también durante el homenaje, recordando la importancia de “no desesperarse y seguir perseverando” para alcanzar las metas.

Pero por encima de todo, Honorio Romero ha colocado a su familia como pieza fundamental para alcanzar el éxito que ahora se le reconoce con la Cruz de San Raimundo. Conteniendo las lágrimas, el santaeulaliano ha recordado primero a su padre, al que no vio descansar “ni un día”, y también a su mujer, sus hijos y sus nietos.

Un futuro con familia, amigos y muchos viajes

Además de la Cruz, el Colegio Notarial de Aragón ha hecho entrega a Romero de una placa conmemorativa como agradecimiento a su carrera en su despedida oficial tras jubilarse. Un obsequio que ha recibido de manos del decano del Colegio, Dámaso Cruz, quien ha destacado la fuerza, iniciativa y liderazgo que Romero ha mostrado durante años.

Por su parte, el turolense ha prometido que en el futuro más inmediato, y liberado ya de las obligaciones profesionales, tiene previsto dedicarse a cuidar y disfrutar de su familia y sus amigos. “Y viajar, viajar mucho”, ha finalizado Romero.