El albergue y el comedor social de Huesca abren de nuevo sus puertas tras su mejora

En el año 2018, el albergue registró cerca de 5.700 usos de más de 1.500 personas
photo_camera En el año 2018, el albergue registró cerca de 5.700 usos de más de 1.500 personas

El albergue de transeúntes municipal y el comedor social oscenses se ponen de nuevo en funcionamiento desde este sábado tras haber permanecido cerrados durante un mes para acometer obras de mejora y trabajos de mantenimiento sanitario.

La concejala de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Huesca, Rosa Serrano, ha explicado que se han llevado a cabo diferentes trabajos de pintura y albañilería porque las instalaciones “necesitaban un lavado de cara, que se ha acometido con recursos propios del Ayuntamiento”. Los únicos trabajos en los que sí se ha tenido que invertir han sido en los de mantenimiento sanitario, que han supuesto un coste de casi 1.500 euros.

Durante el tiempo que las instalaciones han permanecido cerradas, el Ayuntamiento “ha estado muy pendiente de los usuarios para que nadie se quedara ni en la calle ni sin comer”, ha aseverado Serrano, quien también ha indicado que muchos de los usuarios, conocedores de este cierre temporal, se han dirigido directamente a los albergues de otras localidades.

A los transeúntes que han llegado a Huesca entre el 14 de octubre y el 15 de noviembre se les ha ofrecido manutención y una ayuda de transporte para que pudieran viajar hasta otras zonas cercanas. En total, se ha atendido a 55 personas, se han utilizado 34 billetes de autobús y se han prestado 70 servicios de manutención.

Asimismo, los usuarios del comedor que residen en Huesca han contado con ayudas económicas.
En el año 2018, el albergue registró cerca de 5.700 usos de más de 1.500 personas. Además, cada día duermen en el albergue una media de 20 personas y el comedor registra una media de 30 usuarios.