Los últimos 25 años de la historia musical de Zaragoza tienen como principal protagonista al Auditorio. A lo largo de este tiempo, su director, Miguel Ángel Tapia, ha sido testigo de los mejores artistas, grupos y orquestas del mundo.
Para celebrar el aniversario, Tapia confía en recuperar el esplendor de este referente de la música zaragozana con una programación de gran calidad. Asegura que tocaron fondo con la crisis económica, pero ahora el número de abonados está creciendo y en esta edición han conseguido sobrepasar los mil.
Pregunta.- ¿Zaragoza escuchaba música clásica antes del Auditorio?
Respuesta.- Ha habido siempre música clásica en la ciudad. Primero estuvo la Orquesta Sinfónica de Zaragoza hace muchísimos años con aquel maestro mítico Dimitry Berberoff. Finamente despareció la orquesta y ha quedado la Sociedad Filarmónica, que ha mantenido la llama viva de lo que son los conciertos de tipo camerístico.
P.- ¿Qué novedades tienen para estos 25 años?
R.- El aniversario arrancó con actuaciones desde el 4 de octubre con un concierto en el que repetimos el que hubo hace 25 años. En aquel momento lo hizo la Orquesta Nacional de España y hemos tenido ahora la oportunidad de presentar al público nuestra orquesta y coro con el mismo programa que se hizo en esa época. Ha sido de lo más emotivo. En 25 años hemos constatado que se ha hecho un buen trabajo en la trastienda y ese trabajo ha salido a la luz.
P.- ¿Qué ciclos hay en esta edición?
R.- Este año se han unificado los ciclos de otoño y primavera y ahora es una única temporada, que abarca desde octubre hasta el mes de mayo, es decir la primavera del año 2020.
P.- ¿Qué tal el arranque?
R.- Inauguramos con uno de los tenores más importantes que hay hoy en día, el polaco Piotr Beczala, que se ha erigido en una de las figuras más reputadas en el escalafón operístico mundial. Es todo un acontecimiento. El año pasado trajimos al mexicano Javier Camarena y nos quedaría por traer a Kaufmann.
P.- ¿Tiene afición Zaragoza por este tipo de conciertos?
R.– La música clásica en Zaragoza tiene seguidores vengan o no vengan al Auditorio. Hemos tenido temporadas como la de 2004 a 2008 en la que el Auditorio estaba con lleno absoluto de abonados. En primavera teníamos 1.700 abonados y en otoño, otros tantos. Ahora hemos descendido porque la crisis ha afectado a todos los sitios y sobre todo a las clases medias, que están muy castigadas.
P.- ¿Ha mejorado?
R.- Hemos tocado fondo y esta temporada vamos a tener más de mil abonados. Creo que vamos a ir creciendo. Hemos conseguido que haya más de mil abonados, es un buen número para empezar a crecer. Estamos en un momento bueno porque las ferias se están recuperando. Zaragoza es una gran ciudad para ferias. El Palacio de Congresos no puede absorber todo y nos vienen muchos que no pueden hacerse allí.
P.- ¿Está bien reconocida la importancia de este edificio por las instituciones?
R.- El nuevo equipo de gobierno que ha entrado ahora se lo ha tomado con mucha seriedad. En este momento, la vicealcaldesa tiene en su cabeza, así nos lo ha comunicado, que el Auditorio tenga la brillantez que tuvo en años pasados. Con el XXV aniversario se va a realizar un esfuerzo por revitalizar la música clásica.
P.- Un Auditorio que va más allá de la música clásica.
R.- Aquí también se hace pop, rock, flamenco, jazz y tenemos grandes ferias y eventos de todo tipo. Pasan más de 400.000 personas al año por este Auditorio. Hacemos hasta la Feria del Cómic. La Sala Mozart está reconocida en el mundo como una de las mejores salas acústicas que hay en Europa y nos ha beneficiado mucho. Es una sala de grandes características y de grandes sonoridades como hay muy pocas en Europa.
P.- ¿Con qué género musical se siente más identificado?
R.- Yo soy un gran aficionado a todo lo que es bueno. Cuando me voy a tomar una copa por ahí pues no me gusta que me pongan música clásica, pero sí que soy un gran aficionado. Para mí hay tres géneros importantes que son la música clásica, el flamenco y el jazz. Han evolucionado y siguen evolucionando. La actual música clásica ha evolucionado mucho, el grupo Enigma hace y produce música actual. Me gustaría que la gente lo escuchara y viera cómo ha evolucionado mucho más que el rock y el pop.
P.- ¿Es el Auditorio un edificio elitista?
R.- Yo nunca diría que es elitista. Diría que quizá puede ser minoritario. La realidad es que todo el mundo que quiere acceder puede hacerlo porque hay precios populares. La entrada de un súper concierto de esta temporada cuesta 60 euros la más cara y la más baja está a 15 euros. Los jóvenes y desempleados tienen hasta un 50% por lo que en algunos casos pueden venir por unos cinco euros.
P.- ¿Qué expectativas tienen de cara al futuro?
R.- Hay que consolidar los 25 años del Auditorio. Queremos que en estos cuatro años se produzca un punto de inflexión y hacer un programa adecuado con todo lo bueno que hemos hecho y desechando lo malo. Queremos hacer un programa con vistas al futuro. Lo bello siempre resplandece y la música clásica es muy bella.
