El estadio Carlos Tartiere acogerá este fin de semana un duelo entre dos equipos que tienen la necesidad de ganar. Mientras que el Real Oviedo quiere reengancharse a la lucha por salir del descenso, el Real Zaragoza buscará una victoria que le permita soñar con el ascenso directo. Se trata de uno de los duelos de la jornada y tendrá lugar el domingo a las 18.30 horas.
Actualmente, las situaciones son opuestas. El equipo de la capital asturiana no ha sumado más que dos puntos en siete partidos. Es decir, dos sobre 21 posibles. Ahora bien, como ya anunció Víctor Fernández, es un equipo con mucha más capacidad de la que ha demostrado. Además, cuenta con un presupuesto mayor que el Real Zaragoza y jugadores de primer nivel como Saúl Berjón, Marco Sangalli o Yoel Bárcenas.
Sin embargo, el Real Zaragoza cuenta con argumentos para ganar el partido. No todos los equipos poseen la solidez de Atienza, la magia de Kagawa y la dinamita de Luis Suárez. Los blanquillos saben que, con una victoria, podrían llegar a los puestos de ascenso directo. Y es que, el Almería se enfrenta al Cádiz, primero contra segundo clasificado.
Si el Real Zaragoza gana, tocaría momentáneamente los puestos que llevan directamente a Primera División si gana el Almería o el partido acaba en empate. En el caso de que ganase el Cádiz, todo dependería del número de goles que anotasen los blanquillos porque empataría a puntos con los almerienses.
La escuadra zaragocista contará con las bajas de Carlos Vigaray y James Igbekeme, que se suman a la de Alberto Zapater. Mientras que el capitán todavía no tiene una fecha para su regreso, Víctor espera que los otros dos puedan reincorporarse “cuanto antes”. El lateral madrileño ha sido una pieza fundamental desde el comienzo de temporada y ahora ocupará su puesto el canterano Julián Delmás.
El Real Zaragoza necesita la victoria de la misma forma que el Oviedo. Será un partido disputado y difícil entre dos equipos que se juegan mucho. La posición en la tabla de cada uno no es determinante ni influyente cuando ambos conjuntos saltan al terreno de juego. El Carlos Tartiere será el digno escenario que acogerá la esperada batalla.
