El consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Joaquín Olona, ha hecho este miércoles un llamamiento al “rigor y la exigencia” de los ganaderos de porcino en el acatamiento de la norma sobre los purines. El decreto de Gestión de Purines se aprobó el pasado mes de marzo y, aunque los afectados disponen de un amplio plazo para su aplicación, la Consejería insiste en que es necesario para que “el sector porcino sea un sector económico sostenible y con futuro”.
Olona ha dirigido unas palabras en el marco de la celebración de una jornada técnica sobre el sector en el Patio de la Infanta de Ibercaja, organizada por Eumedia. Allí ha destacado que el porcino supone para Aragón un empuje económico de 1.624 millones y alrededor de un 3,5% del PIB. El “reto” ahora se sitúa en cómo tratar los purines para que estos “dejen de ser un problema” en la Comunidad. Descarta, por el momento, que puedan utilizarse como biomasa y pone la atención sobre su uso como fertilizantes orgánicos, sustituyendo a los minerales.
El consejero ha reiterado que es necesaria la colaboración de los trabajadores del sector y ha asegurado que si hay “deficiencias técnicas” en el decreto, puede adaptarse para que este sea lo más consensuado posible y satisfaga a todos. Así, el plazo de aplicación es de entre uno y dos años, “porque queremos que se aplique de verdad y eso requiere tiempo”, ha remarcado Olona.
La normativa recoge, entre otras medidas, la creación de centros gestores de estos residuos para su tratamiento y conversión en abono y la restricción del levantamiento de granjas en zonas medioambientales protegidas. Mientras los primeros están en proceso de desarrollo e implementación, el segundo punto ha producido cierta polémica, como ha señala el consejero. “No a todo el mundo le ha parecido bien, y yo asumo la crítica, pero no tiene ningún sentido que estemos haciendo granjas de cerdos en espacios naturales protegidos porque es totalmente incompatible y creo que no es el mensajes adecuado para la sociedad”, ha expresado.
Ha terminado asegurando que la Consejería es “ambiciosa” en este fin y que garantizará el desarrollo de las tecnologías en el ámbito ganadero.
Incrementar el valor añadido
Aragón trabajará al mismo tiempo para retener más valor en sus fronteras. Así, el consejero ha asegurado que las oportunidades internacionales que están surgiendo en el sector para Aragón no deberían desaprovecharse y que ya hay “actuaciones empresariales e industriales que van a hacer que ese valor añadido se quede aquí”.
En concreto, se trabajará por exportar canales y productos semielaborados al exterior y no solamente cerdos vivos.
