Aragón seguirá sin subvencionar la vacuna del meningococo b

Aragón ha decido seguir la pauta nacional
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El Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón ha publicado el nuevo calendario de vacunación. Entre sus cambios no se encuentra la inclusión de la vacuna del meningococo b, aunque muchos padres deciden ponérsela a sus bebés por recomendación de sus pediatras. Tanta es su demanda desde que en 2016 se permitiera su venta en España, que desde entonces los progenitores han sufrido desabastecimiento en las farmacias y largas listas de espera para poder hacerse con ella.

Desde el Departamento, el jefe de Servicio de Prevención y Promoción de la Salud de la Dirección General de Salud Pública, Luis Gascón, asegura que Aragón ha decidido adoptar lo acordado entre el Estado y las comunidades autónomas en la Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud de España.

“Desde el punto de vista técnico y la situación epidemiológica sigue sin estar indicado una vacuna que tiene suficientes incertidumbres como para incorporarse”, asegura Gascón. Respecto a la situación epidemiológica, recuerda que “desde el año 2000 se está produciendo una disminución continuada de la incidencia de esta enfermedad”. Y, desde el punto de vista técnico, “todavía carecemos de estudios reales de efectividad de esta vacuna y tampoco conocemos el alcance y la duración que tiene la inmunidad que genera” dicha vacuna. Por todo ello, a nivel nacional, “hemos decidido ponerla en duda”.

Por ello, la gran mayoría de comunidades autónomas han tomado la misma decisión que Aragón. Sin embargo, Castilla y León ha decidido ir por libre, y va a empezar a subvencionarla desde junio, para lo que ha destinado un presupuesto de 5,2 millones de euros. También han anunciado que seguirán el mismo camino en los próximos meses Andalucía, Canarias y Melilla.

Mientras que en estas comunidades les saldrá gratis a los padres, en el resto, si los progenitores deciden administrarla a sus bebés, deberán desembolsar un gasto que supera los 300 euros. Solo la farmacéutica GlaxoSmithKline la posee. Bajo el nombre comercial de Bexero, alcanza un precio de 107 euros por toma, siendo tres si se aplica en niños menores a dos años.