Con muchas ganas se esperaba la rueda de prensa que, como cada año, ofrece el director deportivo del Real Zaragoza para hacer balance de la temporada. Lalo Arantegui sí ha dado la cara en fondo y forma, al contrario que el presidente Christian Lapetra, poco amigo de realizar autocrítica tras un año nefasto. De hecho, ha asumido el “100% de la responsabilidad” y de la clasificación final, en un paupérrimo decimoquinto puesto con sólo 51 puntos.
“Como máximo responsable del área deportiva, y habiendo tomado todas las decisiones con libertad, asumo el 100% de la responsabilidad, de la clasificación que ha tenido el Real Zaragoza esta campaña”, ha comenzado su discurso. En este sentido, también ha calificado como de “decepción” un año donde han estado muy lejos del “primer objetivo marcado, que era el ascenso”.
Las justificaciones de Lalo para determinar el puesto final han “disparado” hacia muchos frentes. El primero de ellos, Natxo González: “Fue un cambio muy brusco en el líder del equipo con el entrenador, se marchó de forma muy unilateral y no nos dejó tiempo para configurar una plantilla que estaba prácticamente cerrada y en la que no se podía cambiar el guion del equipo, ni el estilo ni sus componentes”.
Además, ha lamentado la aparición de un “factor diferencial como han sido las lesiones”, con futbolistas con los que no han podido “contar prácticamente en todo el año”. Un grupo “muy joven” en el que Lalo depositó todas sus esperanzas y confianza de poder “igualar o superar la clasificación de la temporada pasada”, terceros, quedando eternamente lejos. También ha citado “el número de entrenadores”, tres, teniendo en cuenta que “salvo Víctor Fernández ninguno ha conseguido números objetivos para pelear por el ascenso”.
Eso sí, Lalo Arantegui ha querido también citar facetas positivas, como es la continuidad de Víctor Fernández al frente del banquillo aragonés con quien trabajará “muy de la mano” en la confección de la plantilla. O el poder contar con “jugadores jóvenes, propiedad del Real Zaragoza” a los que intentará “proteger para que sean la base y ayuden a conseguir el objetivo”.
En cuanto a su situación personal, ha explicado que se ha sentido “muy respaldado desde el comienzo y muy querido”, demostrando el club desde que está él tener “estabilidad” y que no ha habido “toma de decisiones impulsivas”.
