Ibercaja rebaja las previsiones de crecimiento de Aragón para este año hasta el 2,4%

La entidad ha presentado este jueves el número 67 de la revista Economía Aragonesa
photo_camera La entidad ha presentado este jueves el número 67 de la revista Economía Aragonesa

Aragón presentará un ligero decrecimiento este 2019. En concreto, será una décima menos que en 2018, rebajando el porcentaje de crecimiento de su PIB hasta el 2,4%. Según las estimaciones presentadas este jueves por la entidad financiera Ibercaja, a pesar del resbalón económico, la tendencia aragonesa mantendrá a lo largo del año rumbo “favorable”, por encima incluso de la media española (2,3%). Un dato que incluye ya cierto margen contemplativo de los posibles avatares electorales venideros.

Ibercaja ha expuesto sus previsiones durante la presentación de la revista económica aragonesa número 67. Allí, el director financiero de la entidad, Antonio Martínez, y el experto analista Santiago Martínez, han radiografiado el escenario económico mundial vigente, desglosando las posibles variables causales del “enfriamiento global” que padece hoy la economía internacional.

Según lo expuesto, la más descollante e influyente de todas ellas no es otra que la “incertidumbre geopolítica” devenida de eventos como el Brexit o las guerras comerciales. Acontecimientos que han motivado la desaceleración mundial, repercutiendo en las cadenas productivas y las exportaciones (que asimismo se muestran a la baja) y desencadenando relativos seísmos en las economías más locales.

Sin embargo, y a pesar de los signos de vulnerabilidad de la economía global, Aragón mantiene una posición privilegiada dentro de España, gracias a la sintonía de la proyección y producción industrial, la creación de empleo y el “esfuerzo inversor” realizado en comparación con épocas anteriores. En esa línea, Martínez ha asegurado que España es una de las alumnas aventajadas de la Zona Euro, ya que se ha sabido abrigar ante ese amenazante “frente frío” gracias al savoir faire en materia de empelo, afianzamiento y apuesta por ciertos sectores, y a la estabilización de otros parámetros económicos como los tipos de interés.

Aun así, y para que no le ocurra como a las economías que han presentado un “mayor frenazo” como la alemana y la italiana (que ya se encuentra en recesión técnica), España deberá seguir afrontando “desafíos estructurales”, como el aumento de “productividad “a largo plazo”.