El 40% de los aragoneses cree que la violencia de género no existe

Este estudio se enmarca en el Pacto de Estado contra la Violencia de Género firmado en septiembre de 2017
photo_camera Este estudio se enmarca en el Pacto de Estado contra la Violencia de Género firmado en septiembre de 2017

Un equipo de sociólogos, psicólogos y trabajadores sociales de la Universidad de Zaragoza ha realizado dos estudios para conocer el alcance de la violencia de género en Aragón. Los resultados son alarmantes: el 40% de los hombres encuestados considera que la violencia contra las mujeres no existe o que se produce en muy pocos casos. Esto, unido a la falta de credibilidad que sufren muchas mujeres, lleva a que solo un 30% de ellas denuncien.

La violencia de género se expresa en formas muy diferentes: puede ser acoso o abuso sexual, violación, discriminación laboral, control psicológico o económico, etc. Desde el Instituto Aragonés de la Mujer (IAM) reclaman más y mejores recursos para que las mujeres no sientan miedo a la hora de denunciar. Además, quieren que se incorporen los valores afectivo-sexuales en la educación “porque los jóvenes de hoy se están educando sexualmente en la pornografía, que representa escenas de violencia sexual absolutamente perversas”, ha explicado su presidenta, Natalia Salvo.

Uno de los estudios se focaliza en detectar casos en el territorio aragonés, cuantificarlos y analizarlos. Las encuestas se realizaron a un universo de 1.000 individuos, de los que 510 eran mujeres y 490, hombres. El 16% de las aragonesas confesaron haber sufrido violencia sexual a lo largo de su vida, el tipo de violencia que menos se denuncia. Esto sucede porque, en muchos casos, proviene de una persona del entorno. “Se piensa que las agresiones solo son de un desconocido por la noche, pero en la mayoría de las casos el agresor es tu tío, o tu hermano, o tu pareja, una persona que se supone que te tendría que cuidar”, ha relatado Salvo, y por eso no se busca ayuda ni se denuncia, porque lleva implícito “resquebrajar los cimientos del hogar”.

El mayor número de casos se concentra en mujeres menores de 30, y este es un dato que preocupa especialmente porque “hay jóvenes de 15 años reproduciendo modelos patriarcales de género, que albergan ideas sexistas, que entienden los celos como prueba de amor”, ha añadido el experto que ha coordinado los estudios, Santiago Boira.

El segundo estudio se centra en la percepción que la población aragonesa tiene de este problema. Así, aunque existe, en su generalidad, un rechazo rotundo a la violencia de género, el 22% de los mayores considera que si una mujer va sola o vestida con ropa “provocativa”, tiene parte de culpa si le ocurre algo. El 20% de los hombres cree que presionar a la pareja para mantener relaciones sexuales no es violación. El estudio continúa diciendo que las principales razones que justificarían las agresiones sexuales por parte de los hombres es la intolerancia al rechazo de la mujer y el intento de controlarlas.

Las investigaciones se enmarcan dentro del Pacto de Estado contra la Violencia de Género que firmaron todos los partidos en septiembre de 2017 y por el que se conceden más ayudas para profundizar en este campo. Con ellas, el IAM espera continuar investigando en los diversos tipos de violencias que sufren las mujeres. Especialmente ahora, cuando se está produciendo “una cuarta ola feminista”, en palabras de Salvo, “que ha colocado a la violencia contra las mujeres en el epicentro de las protestas” y que se ha materializado en movimientos como el #MeToo, en Hollywood, #Cuéntalo, en España o #MiraCómoNosPonemos, en Argentina.