El prestigioso Estudio Aardman británico nos presenta su nuevo trabajo, el largometraje titulado en España ‘Cavernícola’ (Early Man en inglés) dirigido por el prestigioso y ‘alma mater’ de la compañía Nick Park. La película lleva a la pantalla el guión escrito a seis manos por Mark Burton (con quien Park ya colaboró en la prestigiosa y galardonada joya llamada ‘Wallace & Gromit: La maldición de las verduras’ y quien debutara en la dirección con la adaptación de la exitosa también serie televisiva de Aardman ‘La oveja Shaun’), James Higginson y John O’Farrell. Los tres autores escriben una historia que narra como una pequeña tribu de la Edad de Piedra y que vive en un claro de un bosque rodeado de volcanes es expulsada a la zona peligrosa por la invasión de un poblado avanzado a la Edad de Bronce. A raíz de ahí Dug, nuestro joven protagonista, no se quedará con los brazos abiertos sino que se infiltrará en la población regentada por el egoísta Lord Nooth para tratar de recuperar su amado bosque. Una vez allí conocerá a Goonar, una joven vendedora, y descubrirá la importancia que tiene para esa cultura el futbol, tratando de desafiar a Lord Nooth a un partido con mucho en juego.
Lo cierto es que ‘Cavernícola’ ha sido francamente una decepción para quien les escribe. Ya se sabe que las expectativas juegan un papel primordial en la sensación que genera el film en cada persona y que hay que saber lidiar con ello pero, sabiendo y conociendo los trabajos anteriores -esas joyas animadas en stop-motion que homenajean una vez y otra también al precursor y gran transgresor en animación y efectos especiales en plastilina que es Ray Harryhausen (1920-2013)- es difícil no esperar lo máximo. Películas como ‘Chicken Run. Evasión en la granja’ en la que se homenajea a ‘La gran evasión’ (John Sturges, 1963), la oscarizada ‘Wallace & Gromit. La maldición de las verduras’, ‘Arthur Christmas: Operación regalo’, ‘¡Piratas!’ o la popular adaptación de ‘La oveja Shaun’ son películas de gran calado, algunas de un elevado prestigio, hacen un flaco favor al estudio cuando irremediablemente las comparas con este último trabajo donde lo nuevo sale claramente perdiendo.
Respetando el titánico esfuerzo que supone la técnica del stop-motion y el caché anterior, sin olvidar la meticulosidad e imperfección deseada en la creación de los personajes en plastilina, no puedo mas que estar profundamente decepcionado con esta última propuesta. Un film que vincula la historia de la humanidad con la creación del deporte rey (cierto que los británicos inventaron el fútbol y quién mejor que ellos para amarlo y criticarlo), y que cede el ingenio y brillantez de sus films anteriores para caer en una historia previsible y poco imaginativa que con el avanzar de los minutos que recordará demasiado a ‘Futbolín’ de Juan José Campanella en lugar de rememorar lo mejor de ‘Evasión o victoria’.
El discurso facilón de la película oscila entorno a la conveniencia del trabajo en equipo y critica con dureza la avaricia económica de quienes regentan los clubs de fútbol así como a los jugadores individualistas que solo piensan en su propio bien.
Otro punto que provoca que me aleje más de la película es el flojo doblaje que posee. Si en la versión original pueden presumir de contar con Eddie Redmayne, Tom Hiddlestone, Timothy Spall o Maisie Williams, en la española tenemos que padecer a Chenoa, Hugo Silva y a Mario Vaquerizo como un avaricioso y ambiguo Lord Nooth. Un obstáculo casi insalvable.
En definitiva una propuesta menor de Aardman rica en diseño y pobre en historia y originalidad que hará disfrutar a los pequeños y amantes del fútbol pero que posee más carencias que aciertos.
Texto: Alfonso Asín.
LO MEJOR: La mascota ‘cerdog’. El diseño de los personajes.
LO PEOR: El doblaje al castellano. La tendencia del film a caer en trivialidades.
VALORACIÓN:
Banda sonora: 6
Doblaje: 3
Guión: 5
Dirección: 5
Satisfacción personal: 4
NOTA FINAL: 5
