Hay espacio para todos

Con la espectacular inauguración de Puerto Venecia, hoy se ha puesto el brillante colofón a uno de los proyectos más importantes de cuantos se han desarrollado en la historia reciente de la Comunidad. Las cifras hablan por sí solas: más de mil millones de euros de inversión, 4.000 puestos de trabajo, 20 millones de visitas al año y 206.000 metros cuadrados que hacen de éste el mayor centro comercial y de ocio de toda España, un coloso que promete revolucionar el concepto de compra con una propuesta que transciende los estándares conocidos.

Con la espectacular inauguración de Puerto Venecia, hoy se ha puesto el brillante colofón a uno de los proyectos más importantes de cuantos se han desarrollado en la historia reciente de la Comunidad. Las cifras hablan por sí solas: más de mil millones de euros de inversión, 4.000 puestos de trabajo, 20 millones de visitas al año y 206.000 metros cuadrados que hacen de éste el mayor centro comercial y de ocio de toda España, un coloso que promete revolucionar el concepto de compra con una propuesta que transciende los estándares conocidos.

Desde que el proyecto comenzara a gestarse en el año 2000, siempre ha dado muestras de su solidez. Una fortaleza que quedó patente en la apertura de la primera fase de la obra en 2008, el Parque de Medianas que recibe anualmente a 6 millones de compradores y que trajo consigo la llegada de la multinacional sueca IKEA a Aragón. No ha sido la única. Desde entonces grandes enseñas como El Corte Inglés, la irlandesa Primark que monta su establecimiento más grande en España o la mediática Apple han elegido Puerto Venecia, el nuevo referente comercial para todo el corredor del Ebro.

No cabe duda de que, tanto en términos cuantitativos como cualitativos, un proyecto de este calado es importante para Aragón. En la actual coyuntura, la Comunidad está necesitada de iniciativas que dinamicen su economía, que sean motores de creación de empleo, que se conviertan en un polo de atracción de nuevos visitantes y, sobre todo, que generen ilusión.

Sin embargo, es importante también que se realice un esfuerzo por mantener el equilibrio comercial. Hoy mismo, la Federación de Empresarios de Comercio y Servicios de Zaragoza y Provincia (ECOS) ha organizado un desfile para dar a conocer la moda de la próxima temporada, enésimo intento de una organización que trabaja duro por promocionar el comercio de proximidad y que se siente poco apoyada en un momento en el que la crisis y las obras del tranvía han hecho bajar muchas persianas.

También las otras grandes superficies se mantienen alerta. Noticias como la prolongación de la línea 31 hasta el nuevo centro comercial o la de la posibilidad de que se declare zona de gran afluencia turística son recibidas con recelo por la competencia, que reclama las mismas reglas para todos, sin tratos de favor, sin sospechas.

Las distintas administraciones de la Comunidad deben hacer aquí un esfuerzo por hacer que se cumplan las normas propias de un mercado libre, sin conceder privilegios y tratando de igual a igual a todos sus agentes, haciendo posible, además, la convivencia entre el comercio tradicional y las grandes marcas de la distribución. Si las cosas se hacen bien, y más cuando se recupere la situación económica, habrá espacio para todos.