Lituénigo.- Como cada último domingo de septiembre, la localidad zaragozana de Lituénigo ha sido escenario de una de las fiestas más destacadas de la comarca de Tarazona y el Moncayo, el Pesaje de los Niños, declarado de Interés Turístico en Aragón. Este año, se ha alcanzado la cifra récord de 41 bebés pesados, con dos parejas de gemelos incluidas.
La cita ha comenzado después de la misa, cuando los cofrades han recogido todo el trigo necesario para realizar el pesaje y la posterior subasta. Una parte procede de las gentes del pueblo, que lo donan, y otra la aportan las familias que acuden a Lituénigo a pesar a sus niños. Esta vez la plaza de la iglesia se ha quedado más pequeña que nunca para las cientos de personas que han acudido a ver de cerca esta tradición con varios siglos de historia.
A continuación, han ido pasando uno a uno todos los pequeños por la balanza romana que se utiliza en el pesaje. En un extremo se coloca un cesto con el bebé –siempre nacido el mismo año- y en otro, el cesto donde se echa su mismo peso en trigo. Los orgullosos padres y sus familiares se colocan detrás del niño para disfrutar de un momento único que apenas dura unos segundos pero que cada vez atrae a más gente.
De hecho, de los 41 bebés pesados este año, muy pocos descendían de Lituénigo. La mayor parte son de parejas de Tarazona y comarca, y otros llegados incluso de comunidades vecinas, como Navarra o País Vasco. Para algunas familias, la de hoy era su primera vez en el pesaje, pero muchas otras ya habían pesado a sus otros hijos años atrás. “Estos años atrás estábamos rondando los 30 niños, pero la fiesta se ha consolidado y esta vez la cosa ha querido que sean más y eso es bueno”, ha afirmado el alcalde, Alberto Negredo.
Subasta del trigo
A continuación, ha tenido lugar la subasta del trigo recogido en el pesaje, un total de 1.100 kilos. El precio inicial se ha fijado en 0,25 euros el kilo, es decir, un total de 275 euros. Como es habitual, se ha establecido el tanto a 3 céntimos, y el primero en pujar ha sido el primer edil de Lituénigo, con cinco tantos.
La subasta de este año ha sido más rápida que en otras ocasiones y enseguida se ha resuelto. Tras varias pujas, Cándido Soria, vecino de Lituénigo, ha conseguido cruzar la puerta de la iglesia y coger la lleva que lo ha hecho merecedor del trigo. Ha sido después de 12.160 tantos, que ha elevado el precio del trigo a 0,58 euros el kilo.
Un año para pagarlo
De esta forma, tendrá que abonar un total de 639,80 euros, la mitad que otros años, ya que la subasta ha sido menos participativa. De hecho, el precio por kilo ha aumentado con respecto al año pasado, no así el monto final, que ha quedado por debajo de la mitad. Ahora, Cándido Soria tendrá un año para sacar todo el rendimiento posible al grano y pagarlo.
Así lo establece la tradición del Pesaje de los Niños, que tiene sus orígenes en el siglo XVII, cuando un matrimonio del pueblo, ante la imposibilidad de tener hijos, pidió ayuda a un familiar de Tarazona que era monje capuchino. Fray Matías aseguró que el cielo escucharía el deseo de la pareja, que prometió donar a San Miguel tantas talegas de trigo como pesara su retoño. El niño nació, pesó siete kilos y los padres cumplieron la promesa delante de todo el pueblo.
