Zaragoza.- Un `spot´ de 30 segundos y otros cuatro de 10 segundos, más de un millón de contraetiquetas en las botellas de Ámbar Green con fichas de las diferentes especies protegidas, 15.000 folletos informativos, un `mailing´ a los establecimientos de hostelería y otro a creadores de opinión pública pidiendo colaboración en la protección de especies amenazadas, puntos de información en los centros comerciales, actividades de calle y charlas divulgativas: éstas son las actividades que la compañía cervecera “La Zaragozana” organizará durante el verano con el fin de impulsar la protección de especies en peligro de extinción que, este año, coincidiendo con el Año del Agua de Naciones Unidas, ha elegido a la nutria como ejemplo.
La Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos, que ahora ha extendido su actividad a la protección de otras variedades de fauna amenazada, y la marca Ámbar Green de la compañía cervecera La Zaragozana colaboran desde 1997 en la campaña “Especies Green”, que pretende hacer llegar a la población la confianza en la posibilidad de conservar a las especies amenazadas y emblemáticas de Aragón, invitándola a participar en la protección del patrimonio natural. Tal es el caso de la nutria, mamífero protegido desde 1973, que habita en territorio aragonés y que en los últimos años ha visto mermado su hábitat.
El vicepresidente de la Fundación de Conservación del Quebrantahuesos, Óscar Díez, al hablar de las características del medio en el que se mueve la nutria, ha destacado que la disminución de estas zonas acuáticas, “un producto escaso y precario”, demuestra “lo mucho que queda por hacer en relación a la instalación de depuradoras, que en una sociedad moderna como la nuestra deberían existir en cantidad suficiente”. Asimismo ha explicado el riesgo que sufre este mustélido que, como depredador, “acumula todo tipo de contaminantes”, como han demostrado los diversos análisis realizados en los excrementos de este animal.
Por otro lado, el director de Marketing y Comunicación de La Zaragozana, Enrique Torguet, ha resaltado la importancia de la campaña “Especies Green”, que en su edición anterior dedicada a la perdiz nival ha dado “resultados positivos”, y que a lo largo de los siete años de realización ha “centrado esfuerzos en el quebrantahuesos, el bucardo, el oso pardo y el urogallo”, además de la ya mencionada perdiz nival. Durante esta campaña, Ámbar Green llevará fichas informativas pegadas en sus botellas, en las que se ofrecerán datos sobre la situación de cada una de estas especies representativas de la fauna de la Comunidad Autónoma.
El `spot´ publicitario que se lanzará este verano por televisión contiene imágenes en las que seres humanos se comportan y emiten sonidos como los mamíferos y aves sobre los que esta campaña intenta sensibilizar a los ciudadanos. Se pretende así impulsar su conservación “con cierto sentido del humor, pero sin ridiculizar a estas especies amenazadas”, ha declarado el técnico de la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos, José Antonio Gil.
LA NUTRIA
La nutria es un mamífero mustélido que habita en aguas cristalinas y puras. A pesar de que su presencia ha disminuido en los últimos años, está presente en muchos ríos de Aragón como el Cinca, Ésera, Isábena, Noguera Ribagorzana, Jalón, Ortiz, Mesa, Piedra, Guadalope, Matarraña, Guadalaviar o Mijares. Todos ellos mantienen aún su riqueza piscícola y una baja contaminación, aguas cristalinas y fondos pedregosos, orillas bordeadas por bosques y vegetación espesa.
El peso de la nutria varía entre los 6 y los 16 kilogramos, su longitud es de 50 a 80 centímetros, a los que hay que añadir de 30 a 60 centímetros de cola, y su altura es de 25 a 35 centímetros. Su alimentación está compuesta, en un 80 por ciento, a base de peces (truchas, salmones, ciprínidos, anguilas, bogas y barbos) y, en menor medida, aves acuáticas, anfibios, ratas de agua y cangrejos.
El periodo de gestación es de nueve semanas y las madres alumbran, principalmente en primavera o inicios del verano, dos o tres crías que permanecen junto a ellas durante ocho meses. La nutria puede vivir en solitario o grupo y su actividad es por lo general crepuscular o nocturna. Las principales amenazas de esta especie son la contaminación orgánica y química, la alteración del régimen natural de caudales, la pérdida de hábitats acuáticos y de ribera, la introducción de especies exóticas y, en menor medida, los atropellos en las carreteras.
