Zaragoza.- En Aragón cerca del 10% de las personas padece algún tipo de invalidez y la cifra ronda los cuatro millones si hablamos en términos nacionales. En la capital aragonesa muchos espacios están completamente habilitados para estas personas, pero la integración en el mundo rural es una de las materias pendientes.
El secretario general de Cermi Aragón y presidente del Consejo Territorial de la fundación ONCE Aragón, José Antonio Bes, asegura que, a pesar de que la sociedad ha avanzado notablemente en cuanto a sensibilización, todavía quedan muchos obstáculos por superar, y algunos tan importantes como la accesibilidad o la integración laboral.
Pregunta.- Cermi Aragón aglutina casi el 100% de las entidades de discapacitados. ¿Cómo fueron sus primeros pasos?
Respuesta.- Cermi Aragón nace 1999, pero Cermi estatal se crea en 1993 para defender los temas que las grandes plataformas de la discapacidad quieren plantear en común ante la Administración.
En 1999 se hizo el primer esbozo del comité. Nos reunimos las entidades más importantes del sector y, buscando el bien común y teniendo en cuenta las peculiaridades de cada una, hicimos un primer borrador de estatutos. El 11 de abril de 2000 se constituyó definitivamente hasta el día de hoy.
P.- ¿Cuál es el colectivo más amplio?
R.- Quizá la discapacidad física sea el colectivo más amplio porque agrupa a físicos y orgánicos, la discapacidad mental, la psíquica, los sordos, ciegos… En total somos 116.000 personas con discapacidad en Aragón.
Situación en la Comunidad
P.- ¿Cuál es la situación actual de las personas con discapacidad en Aragón?
R.- La evolución ha sido notable. El asociacionismo ha sido muy importante y la solidaridad entre nuestros colectivos también. Vamos trabajando en políticas comunes que favorezcan a todo el sector. Sin embargo, todavía tenemos una atomización de asociaciones porque cada una quiere tener su particularidad.
En este aspecto, el asociacionismo está bien, pero en estos momentos debemos avanzar mucho más e integrarnos en las grandes plataformas porque sólo así seremos fuertes. Nuestro único fin es defender a las personas con discapacidad y sólo lo conseguiremos haciendo una fuerza común ante los poderes públicos y la sociedad civil.
P.- ¿Es una situación similar a la de otras Comunidades Autónomas?
R.- Sí, aunque cada una tiene sus particularidades. El último Cermi que se ha constituido es el de las Islas Baleares. La unidad de acción suele ser más o menos igual, pero cada autonomía tiene sus características. Desde Aragón luchamos por una serie de cuestiones que creemos fundamentales como accesibilidad, servicios sociales, discapacidad, plazas de funcionarios, etc.
P.- ¿Cuáles son las principales reivindicaciones de este sector?
R.- Sobre todo la accesibilidad. Ha avanzado pero queda muchísimo por hacer. El entorno autonómico o las poblaciones necesitan esa accesibilidad, que una persona discapacitada se sienta integrada en su entorno.
También en materia de Servicios Sociales. Con la Ley de la Dependencia se habla de las políticas de bienestar social del tercer sector y para ello debemos trabajar conjuntamente por todos nuestros asociados tanto por los que están en un pueblecito perdido en el Pirineo como el que vive en Zaragoza capital. También hablamos de convenios con universidades para que nuestros estudiantes puedan trabajar o conseguir que las ayudas a la dependencia o los convenios con las diferentes corporaciones de la Comunidad puedan servir para que nuestras entidades estén perfectamente financiadas y presten, como se han prestado siempre, los servicios a las personas con discapacidad.
P.- El pasado 2 de diciembre se celebró el Día Europeo e Internacional de las personas con discapacidad. ¿Qué valoración haría del acto? ¿Qué impacto tuvo?
R.- Huimos de grandes concentraciones y manifestaciones. Buscamos otra cosa que llegue más al público en general y a la ciudadanía aragonesa. Para ello, hicimos un pequeño manifiesto en el que doce personas de las diferentes entidades leyeron sus principales peticiones. Desde una persona ciega hasta un usuario de discapacidad física o una persona con parálisis cerebral, que habló a través de una grabación que hizo con un ordenador y se oyó una voz sintética, porque no puede hablar absolutamente nada.
Lo que tratamos es potenciar y sensibilizar a la población y sobre todo a los poderes públicos. La presidenta del Gobierno de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, nos cedió sus instalaciones pero no nos pudo acompañar, aunque sí lo hizo el consejero de Salud y Bienestar Social, Ricardo Oliván, y todo su equipo. Luego tuvimos una pequeña actuación de la coral de Asapme, la Asociación Aragonesa Pro Salud Mental.
Sociedad e información
P.- La mentalidad de la sociedad ha avanzado notablemente, ahora estamos más sensibilizados con este y otros muchos temas. ¿Cómo ve a la sociedad de implicada con este sector?
R.- Ha avanzado mucho. Por ejemplo, un acuerdo primordial fue con el tranvía. La accesibilidad es total, aunque nunca existe el 100% que es una utopía, podríamos hablar de hasta un 95 ó 96%. Y eso ha sido gracias a la colaboración y sensibilización del Ayuntamiento y Tranvías de Zaragoza. Lógicamente, con el apoyo de Cermi, ya que las diferentes entidades que lo componen han manifestado su problemática y ha sido un trabajo muy importante para que desde un principio fuera totalmente accesible.
Eso es una muestra importante, pero hay que llevarla a otros sectores, como a las viviendas. Hay una serie de viviendas de protección oficial preparadas para discapacitados, pero no debemos quedarnos aquí. Se debería fomentar el diseño universal, que consiste en programar en plano y trabajar la accesibilidad desde los inicios. Así no se tiene que habilitar la vivienda después, se gasta menos dinero y se consigue mucho más.
P.- ¿Qué obstáculos quedan por superar?
R.- La sociedad civil y las plataformas del tercer sector van avanzando. Falta en accesibilidad y en universidad. Tenemos una muy buena sintonía, pero falta un punto de creernos que una persona discapacitada es una persona normalizada totalmente y que puede, con las ayudas convenientes, seguir unos estudios. Creo que también debemos de buscar que la empresa ordinaria contrate personas con discapacidad porque se darán cuenta de los grandes beneficios que tiene.
El funcionariado. Estamos hablando con muy buena sintonía con el director general de la Función Pública sobre la integración de estas personas en las oposiciones para poder acceder a los puestos de funcionarios. Hablamos de hacer listas para buscar plazas que sean convenientes a cada una de las personas con discapacidad. Es un avance importante, pero debemos buscar esa manera normalizada porque es importante que entren estas personas en la Administración ya que así la empresa normalizada contará más con ellas.
P.- ¿Qué papel juega la información en la sensibilización de la sociedad?
R.- Yo creo que es un 80%. Cermi Aragón tiene una página web muy visitada, con casi medio millón de accesos anuales. Cuando los medios de comunicación se acercan a las diferentes entidades y ven cómo trabajan, contribuyen a sensibilizar al público y se trabaja un tema que considero una asignatura pendiente, que es el voluntariado. Las personas normales deben buscar en el voluntariado una manera de ayudar a las personas con discapacidad y a las entidades que lo componen. La información es de las cosas más importantes y hay que agradecer su divulgación. Por eso tratamos de realizar seminarios y jornadas para sensibilizar a la sociedad en general, pero también a los organismos autónomos.
P.- Este Comité se adapta a las nuevas tecnologías. Además de una página web muy completa, desde 2008 cuenta con la primera televisión dedicada al colectivo de personas con discapacidad. ¿Qué ofrece esta plataforma?
R.- Ofrecemos vídeos que cuelgan las asociaciones de todas las actividades que realizan, incluso vídeos de otros países que demuestran la superación de una serie de personas ante una circunstancia. También se pueden ver todas las actividades de Cermi.
Sobre todo tiene un valor fundamental, y es que es totalmente accesible para cualquier discapacidad y que acoge cualquier duda o contacto sobre todos los temas, ya sea legislación, actividades u organizaciones.
Cada año, en colaboración con la Agencia de Tributos, adecuamos la accesibilidad a las personas para que realicen las declaraciones de la renta. Viene toda la información que existe sobre discapacidad a nivel nacional, se actualiza a diario por lo que los usuarios están al día de sus necesidades.
Dependencia, crisis y mundo rural
P.- ¿Cómo valora la actual Ley para la Dependencia? ¿Qué echa en falta en esta ley?
R.- Si lo digo claro, digo dinero. La Ley de la Dependencia es una Ley de derechos subjetivos importante, pero afecta más a los mayores que a las personas con discapacidad. En los tiempos que corren la situación no es la procedente, la financiación que viene del Gobierno central y autonómico no cubre lo suficiente y nos hemos dado cuenta cuando ha entrado el nuevo Ejecutivo. Tiene sus carencias, pero no dudemos que en siete u ocho años de recorrido seguro que funcionará. La ley de Servicios Sociales también nos ayuda mucho.
P.- En septiembre tuvieron un encuentro con el consejero de Política Territorial, Antonio Suárez, en el que abordaron los problemas de integración que tienen los discapacitados en el mundo rural. ¿Cómo está la situación ahora?
R.- Para nosotros la integración de los discapacitados en el mundo rural es la gran asignatura pendiente. Las nuevas tecnologías nos hacen estar en contacto con las asociaciones y personas con discapacidad de localidades pequeñas, pero son personas que manejan Internet con las que, por tanto, tenemos un contacto diario o muy rápido. Pero hablamos de todo el colectivo y personas mayores que en su entorno lo tienen difícil empezando por el transporte. Muchos de los autobuses que circulan por los pueblos no están adaptados y es un problema importante.
Con los pueblos pequeños, aunque se han sensibilizado y desde 1997 hay un plan con la fundación ONCE para la eliminación de barreras arquitectónicas que van conjuntamente con el Imserso, se ha hecho un plan directo y se ha actuado en zonas importantes, pero hay que trabajar mucho en localidades pequeñas. A veces, con un pequeño cambio de una señal a una persona que está en un pueblo se le ayuda mucho.
P.- ¿Cómo ha afectado la situación de crisis económica a Cermi?
R.- A todas las entidades ha afectado de manera importante. Somos conscientes de la situación de crisis que lleva el país. Nos hemos apretado el cinturón, nos hemos hecho otro agujero, pero ya no tenemos más. Hemos prestado muchos servicios pero también necesitamos colaboración de la Administración. Sé que están sensibilizados, pero hace falta un punto más. Hablamos de personas que han llegado a esta situación por muchas causas y necesitan su apoyo para llevar una vida digna.
Tenemos reuniones habitualmente, en este caso con el consejero de Bienestar y Servicios Sociales y con el director gerente del Instituto Aragonés de Servicios Sociales y hay buena sintonía, pero tenemos que ir a un punto más para que ninguna de estas personas pierda sus derechos.
P.- ¿Cómo afronta el nuevo año? ¿Qué le pediría al 2012?
R.- Que se acabara la crisis. Aunque sabemos que no va a ser así y que vamos a arrastrar durante años una situación heredada de cuestiones globales. Estamos esperanzados y muy preocupados. Vamos a exigir a los poderes públicos que cumplan sus compromisos porque cuando llegan elecciones se citan con nosotros y nos explican sus programas de discapacidad pero cuando pasan las elecciones, a veces se olvidan un poco. La prestación y calidad de servicios la vamos a hacer igual, con que subamos un poquito, un 3 o un 4%, es suficiente y ya vendrán tiempos mejores.
