Zaragoza.- Las marquesinas del tranvía han sido presentadas en sociedad este jueves. El paseo de los Olvidados, situado en Valdespartera, acoge la primera de las 19 paradas que incorporan numerosos elementos de accesibilidad, además de un jardín sostenible en el techo.
Diseñada por el arquitecto Iñaki Alday, responsable de la urbanización del trazado de la línea 1 del tranvía, en la primera fase de las obras, entre las calles Mago de Oz y Gran Vía, van a ser colocadas 16 marquesinas simples y tres dobles en el tramo de Vía Ibérica, con acceso a los dos sentidos de circulación.
La consejera municipal de Servicios Públicos, Carmen Dueso, ha revelado que la marquesina incluye tres cámaras de seguridad permanentemente conectadas con el centro de control, dos enfocadas al andén y otra a la máquina expendedora de billetes, completamente incorporada en la propia parada.
De acuerdo a las aportaciones de la ONCE y la Fundación Disminuidos Físicos de Aragón (DFA), la expendedora respeta los criterios de accesibilidad, con el fin de que sea practicable para usuarios con movilidad y visión reducida. Por este motivo, incluirá textos en Braille y la pantalla contará con un modo de contraste especial para que pueda apreciarse con claridad. El suelo que rodea la máquina expendedora cuenta con textura pododáctil.
La marquesina está cerrada por una lámina acristalada para proteger a los usuarios de las inclemencias meteorológicas. La cubierta, de 15,40 metros de largo por 2,80 de ancho, protege tanto a las personas que se encuentren sentadas como a los que se sitúan alrededor de la marquesina.
La estructura es de acero laminado, pintada con pintura anticorrosión y lacada en negro. Los nombres de las paradas están troquelados con grandes letras que se retroiluminan.
Jardín en el techo
Como curiosidad, Dueso ha destacado la existencia en el techo de un pequeño jardín, que absorbe las radiaciones “para evitar el calor”. La vegetación elegida es sedum, un género que se caracteriza por su adherencia al piso, así como por su poca necesidad de tierra y agua. Las plantas se colocan en bandejas de 55 centímetros cuadrados y sólo diez centímetros de profundidad, para su fácil manejo.
La cubierta cuenta con cuatro puntos de desagüe que permiten que el agua de lluvia se evacue por la parte trasera de la marquesina. El banco, fabricado en poliéster, cuenta con apoyabrazos y apoyo isquiático y tiene una profundidad de 50 centímetros.
 |
|
Algunos tramos del recorrido incorporarán césped natural |
El andén, elevado de la acera para que el acceso al tranvía quede a ras de suelo, mide 68 metros de largo, con el fin de que en un futuro pueda accederse sin desniveles a unidades dobles de diez módulos.
El suelo del andén, al que se accede por rampas, ha sido diseñado en conjunto con la urbanización del trazado y cuenta con una franja longitudinal amarilla podotáctil que indica la zona de seguridad en la que se deben situar los usuarios hasta que el tranvía esté totalmente detenido.
Todas las marquesinas contarán con un panel de leds, en los que se ofrecerá información al ciudadano como, por ejemplo, el tiempo que falta para que llegue el siguiente tranvía. Desde el centro de control se podrá incluir en estas pantallas cualquier información, en tiempo real, que afecte a la circulación de los tranvías.
La elección de esta parada se debe a lo avanzado de las obras en Valdespartera. En la marquesina ya está instalado el hilo de catenaria, así como en otras zonas de Valdespartera y Vía Ibérica.
Se trata de un cable de cobre, que permite que los tranvías, a través del pantógrafo, adquieran la energía eléctrica para funcionar. Las siguientes marquesinas se irán instalando paulatinamente, no necesariamente siguiendo el orden del recorrido del tranvía, según se vayan concluyendo los trabajos previos.
Resto de las obras
Dueso ha informado de que las obras del tranvía están cumpliendo “estrictamente los plazos” y ha reconocido que se está avanzando “conforme a lo previsto”. En este sentido, ha comentado que en la Gran Vía los operarios trabajan en la impermeabilización de la losa.
En cuanto al tráfico, la consejera ha revelado que se ha avanzado “mucho” en los cruces más conflictivos, con el objetivo de que se sean reabiertos coincidiendo con el comienzo del curso escolar.
