Los aragoneses pueden presentar sus voluntades anticipadas con dos testigos en vez de tres

Las Cortes han aprobado este jueves la modificación de la Ley de Salud para las voluntades anticipadas. Con ésta los pacientes sólo deberán tener dos testigos en vez de tres, no habrá comisiones valorativas en todos los centros sanitarios y pasarán a depender del Departamento de Salud.

Zaragoza.- El pleno de las Cortes de Aragón ha acogido este jueves la tramitación en lectura única especial del proyecto de ley por el que se modifica la Ley de Salud de Aragón, en materia de voluntades anticipadas. La consejera de Salud, Luisa María Noeno, ha defendido la libertad de expresión de estas voluntades y ha asegurado que es el principal instrumento de los pacientes para que puedan opinar y además dar respuesta, ha dicho, a la pluralidad de las voluntades en la actualidad, y por ello "hemos respondido".

El proyecto de ley para la modificación de la Ley de Salud, respecto a las voluntades anticipadas, que se ha aprobado con el voto a favor de todos los partidos menos del PP al no apoyarse sus enmiendas, introduce tres cambios. De este modo, éstas pasarán de depender del Servicio Aragonés de Salud al Departamento de Salud y Consumo; a su vez, se reduce el número de testigos necesarios de tres a dos, y sólo uno de ellos no deberá tener relación familiar ni patrimonial; también se elimina la comisión valorativa de este documento en los centros necesarios.

La consejera de Salud ha asegurado que facilita el acceso a la formulación de esa voluntad agilizando los requisitos formales con la reducción de testigos de tres a dos, por "haberse demostrado que es complicado para el otorgante hallar a tres personas que no estén vinculadas familiarmente para hacer de testigos". Además, ha explicado que el ámbito competencial ha hecho que se modifique la competencia del Servicio Aragonés de Salud al Departamento de Salud y Consumo.

Otro de los puntos que ha resaltado Noeno es que este documento evita "que los valores de los intervinientes se posicionen por encima de la voluntad del paciente". También ha afirmado que es un paso más en la regulación de estas voluntades y por ello ha solicitado el respaldo de todos los grupos parlamentarios.

El primero de los cambios está en consonancia con la opinión del Partido Popular, pero no así los siguientes, ya que para el diputado popular Ricardo Canals, esto haría que se redujeran las garantías del paciente y como consecuencia de ello ha presentado tres enmiendas.

En una de ellas el PP ha propuesto la introducción de un nuevo apartado que recoja que además de la presencia de un notario y tres testigos, el paciente pueda presentar sus últimas voluntades ante un funcionario del Registro de últimas voluntades anticipadas.

Por su parte, el portavoz de IU en las Cortes, Adolfo Barrena, se ha mostrado a favor porque "garantiza el mejor cumplimiento de lo que establece la normativa actual y porque va a facilitar que las personas con capacidad dejen claramente expresada cuál es la forma de proceder en situaciones complicadas cuando es necesaria la comprensión". Sin embargo, ha manifestado que votaría en contra si se aprobaran las enmiendas del Partido Popular.

Chunta Aragonesista, que ha presentado dos enmiendas, ha hablado por boca de su presidenta Nieves Ibeas, que ha dado su acuerdo a la modificación, sobre todo en que la que dice que cada centro sanitario no tenga que dar el visto bueno con una comisión. Para Ibeas, "su informe no puede ser vinculante, ya que provocaría conflictos". También ha coincidido en el cambio competencial, pero ha apoyado la propuesta del PP de que el documento se pudiera presentar ante un funcionario del Registro. La enmienda de CHA, ha explicado, viene a añadir un texto que dicta que este Registro se coordine con el Registro Nacional, "un modo de dar una garantía más a los pacientes", ha aseverado Ibeas. La segunda enmienda se ha referido a la buena escritura de la modificación.

El Partido Aragonés ha votado a favor de la modificación y ha apoyado las dos enmiendas de CHA, pero ha cuestionado la viabilidad jurídica de que un funcionario pudiera servir para presentar las voluntades, ha afirmado el diputado aragonesista Javier Callau, por lo que no han apoyado las enmiendas del PP.

Finalmente, el diputado socialista Eduardo Alonso ha ensalzado que esta modificación responde a las exigencias de reducción de los trámites por parte de los profesionales y de los pacientes. Además, ha dicho que a comienzos de 2010 se hará una campaña para dar a conocer este documento de voluntades anticipadas a los aragoneses. El PSOE ha aceptado las enmiendas de CHA y han rechazado con las tres del PP.

La votación se ha dividido por enmiendas, la primera del PP ha sido rechazada, también la segunda, aunque ha sido apoyada además de por el PP por CHA solamente, lo que no ha dado lugar a su aprobación, y la tercera ha tenido el mismo resultado. Por lo tanto, las tres enmiendas del PP han sido rechazadas. Lo contrario ha sucedido con las enmiendas de CHA. En conclusión, las votaciones al proyecto de ley de modificación han registrado 41 votos a favor y 22 en contra (los del PP).