Ejea de los Caballeros.- El alcalde de Biel, José Luis Lasheras, inaugura oficialmente este viernes un refugio de montaña y el sendero interpretativo de la ribera del Arba que, con un coste de 58.500 euros, ha sido financiado por la Diputación Provincial de Zaragoza y el Gobierno de Aragón en el marco del convenio para recuperar las riberas de algunos ríos a raíz de la Expo 2008.
Los aficionados al senderismo y a la montaña disponen de un alojamiento en la ribera del río Arba, en la localidad de Biel. Se trata de una vieja caseta que, acondicionada como refugio, dispone de dos plantas con espacio para dormir, un hogar y una gran mesa de madera para comer.
La caseta refugio, cuyas obras de acondicionamiento finalizaron el pasado mes de enero, está siendo utilizada por excursionistas. Sobre la utilización del mismo, el alcalde de Biel ha señalado que “la gente lo respeta; limpia la chimenea y se lleva la basura que generan”.
Respecto a las obras propiamente dichas, el tejado del refugio es nuevo pero “hecho a imagen y semejanza del primitivo”, ha explicado Lasheras. Además, la planta de arriba dispone de un espacio para dormir y en la de abajo se halla el hogar y una gran mesa de madera. En el exterior se ha colcoado una mesa de hormigón construida con un color imitando al de la tierra.
Además de este alojamiento, se va a inaugurar un sendero interpretativo del agua con señalizaciones en el que se han colocado paneles explicativos. Para tal fin, se realizará un recorrido por el mismo con la guía de los técnicos de la empresa adjudicataria del proyecto, Ebronautas. Según el programa previsto, al llegar a la caseta se servirá un aperitivo.
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| Este abejar, situado en el sendero del río Arba, también ha sido rehabilitado |
El recorrido de este sendero es circular y la duración es de unas dos horas y media. Un tiempo bien aprovechado en saborear la naturaleza y una parte de la etnografía de un pueblo del Prepirineo.
El sendero comienza en el abrevadero de la localidad de Biel y, desde allí, por la plaza Nueva se atraviesa el río Arba hasta el antiguo molino, continuando junto a la acequia de riego, hasta llegar al lavadero, una construcción en piedra, muy típica, que data del último tercio del siglo XIX. Sigue por un sendero estrecho hasta llegar a la zona de Arriello. Desde allí y por pista forestal se llega a otro lugar singular, el Pozo Tronco, en donde existen "marmitas" realizadas por la fuerza del agua. Se sigue esa pista durante un kilómetro por el valle del Arba en la zona denominada "Detrás del Cerro".
